"Mañana jugamos el partido y todavía están cosiendo las camisetas. Si salimos campeones nos tienen que hacer un monumento". La frase, pronunciada por Jorge Burruchaga en una filmación incluida dentro del documental La Historia detrás de la Copa, sería inverosímil en el fútbol actual, lleno de contratos con marcas líderes de indumentaria.
Maradona cuenta en su nuevo libro detalles sobre la camiseta azul.
Sin embargo, en la previa del partido que enfrentó a Argentina con Inglaterra en el Mundial de México 1986, fue apenas un gaje del oficio más en momentos donde la profesionalización no garantizaba recursos ni dinero.
Así, tal como cuenta Diego Maradona en su libro de reciente publicación "Mi Mundial, mi verdad: así ganamos la Copa" (escrito junto al periodista Daniel Arcucci), la historia de la camiseta azul que la Selección usó en aquel juego histórico es muy particular.
"Le Coq Sportif había hecho una camiseta titular linda, muy linda. Con agujeritos y todo, ideal para el calor terrible que hacía en México, sobre todo para ese insoportable horario del mediodía. Pero se habrán olvidado de que algún partido teníamos que jugar con la camiseta alternativa y mucha bola no le dieron a eso, me parece", comienza describiendo el "10".
En la tapa de El Gráfico puede apreciarse la camiseta alternativa original durante el partido contra Uruguay.
Como ilustra Maradona, esa camiseta alternativa original probó tener graves defectos. "Cuando jugamos contra Uruguay, en Puebla, se largó a llover y la azul que nos habían dado pesaba más que un pulóver mojado. Cuando se supo que contra Inglaterra nos tocaba a nosotros ir con la alternativa, porque ellos iban a jugar con la blanca, nos entró la desesperación a todos: ¿con el sol del mediodía y la altura del DF vamos a jugar de pulóver? ¿¡Y contra Inglaterra!? ¡¡¡Ni en pedooo!!!", se horroriza.
Ante el apremio del tiempo y la imposibildiad de que Le Coq enviara una camiseta alternativa más liviana, el cuerpo técnico entró en acción. "Allá salió el pobre Rubén Moschella, el empleado administrativo de la AFA, que resolvía todo. Ahora parece un chiste, pero en ese momento era un drama", recuerda Maradona.
"Cuarenta negocios recorrió Moschella
"Cuarenta negocios recorrió Moschella. Algunos dicen que fue al de Zelada (tercer arquero de la Selección, quien jugaba en México), que tenía una casa de deportes, pero ni Zelada se acuerda", continúa. "La única verdad es que Moschella encontró dos variantes de camisetas, en un par de esas tiendas. Pero ninguna tenía los agujeritos de la original. Las dejó reservadas en los dos y tomó la precaución de ir antes a la concentración con los dos modelos, para consultar cuál comprar. ¡Podría haber comprado dos juegos de las dos, pero así se cuidaba el mango en aquella época!".
El escudo sin laureles cosido a mano es una de las principales características de la camiseta.
Así, la decisión final llegó a manos de Diego que no dudó. "Marqué una con el dedo y les dije: 'Ésta. Con esta le ganamos a Inglaterra'. A 'esta', eso sí, le faltaban el escudo y los números, pequeño detalle. El escudo lo bordaron dos costureras del América. Lo hicieron bastante bien, pero se ve que se durmieron, porque se olvidaron de poner los laureles", agrega.
Los número, plateados pueden apreciarse durante el saludo de Maradona y Shilton, el arquero inglés.
"Y los números, lo de los números fue una joda", remarca especialmente Maradona. "Cuando salimos a la cancha, algunos todavía teníamos brillantina en la cara. Y el 'Negro' Tito Benrós, el genio de los utileros, ni les cuento. ¡Estaba más para el carnaval de Gualeguaychú que para el Azteca, después de estampar 38 camisetas a pura plancha! Es que los números los hicimos plateados, con brillantina. Si se largaba a llover, como en el partido contra Uruguay, se armaba un quilombo bárbaro".
Por su parte, en el libro "El partido", que crónica el antes, durante y después del encuentro entre Argentina e Inglaterra, el periodista Andrés Burgo ofrece una versión levemente diferente sobre el origen de los números de la camiseta: fueron realizados con una tela reflectante usualmente utilizada para camisetas de fútbol americano.