Boca fue el único ofertante de la licitación que lanzó la Ciudad de Buenos Aires para adquirir 3,2 hectáreas en la zona de Casa Amarilla y, por $ 180 millones, se quedó con los terrenos ubicados entre la Av. Almirante Brown y las calles Arzobispo Espinoza, Palos y Blanes.
Si bien desde el club no confirmaron el uso que se le dará a ese espacio, todo indica que estará destinado a la construcción del nuevo estadio que Daniel Angelici prometió en su campaña presidencial.
Eran terrenos pertenecientes al IVC que se destinarían a la construcción de viviendas sociales, pero sólo se concretaron 260. Luego, las tierras fueron cedidas a la Corporación Sur, que llamó a licitación.
Fernando Abal Medina, de la ONG “La Boca Resiste y Propone”, explica la salvedad: “Pedian una garantía de $ 80 millones. La única ONG del barrio de La Boca que puede poner esa suma de dinero es el club Boca Juniors, que presentó un proyecto en el que prometen construir una fuente, una biblioteca, una salita de teatro, un Paseo del Hincha y algunas cosas más. De esa forma lo presentan como proyecto de carácter social”.
Son 3,2 hectáreas que quedan a pocos metros de Casa Amarilla.
Pero en su periplo electoral el presidente del club, Daniel Angelici, empujó su postulación con una promesa grandilocuente: la construcción de un “estadio 5 estrellas”, similar a los europeos. Shopping, restaurantes, bares y demás amenities para un club cuyo estadio le quedó chico.
El presidente de Boca, Daniel Angelici, prometió un estadio-shopping en esos terrenos.
Toda transacción tiene su negociador oficial. En el caso de Boca fue Lucas Labbad, gerente general de Boca. Cuando BigBang intentó consultarlo por la compra, se excusó: “Los que estamos en la línea de trabajo no damos opiniones. De las declaraciones se encargan los voceros, y -perdoname- te dejo porque estoy en medio de una negociación por el libro de pases”.
Polémica
Boca pagó $ 180 millones por esos terrenos, 3,5 veces menos que valor de mercado.
La transacción no está exenta de polémica: según el texto de la licitación, los terrenos deben utilizarse para la construcción de un espacio "recreativo para los vecinos", por lo que distintas asociaciones vecinales se vienen manifestando hace tiempo para rechazar el proyecto.
Esta mañana, el edificio de la Corporación Sur estuvo prácticamente militarizado para evitar conflictos con los vecinos, que continúan luchando por la construcción de viviendas sociales para familias de bajos recursos, aunque esa idea quedó atrás.
Pero eso no es todo. A través de esa licitación. Mientras que un terreno en La Boca cuesta alrededor de US$ 1.400 según el sitio Reporte Inmobiliario, el club xeneize los compró por apenas US$ 410,58 el metro cuadrado. La cuenta es sencilla: a la cotización del Banco Nación de hoy ($ 13,70), Boca gastó US$ 13.138.686, 86.
Boca adquirió los terrenos a un precio 3.5 veces más baratos que su valor de mercado
Si ese monto en billetes estadounidenses se divide entre los 32.000 m2 de terreno arroja ese precio un tanto llamativo. La salvedad es que el valor de mercado es a precio construido y el club los compró a construir.
La Corporación Sur pedía $80 millones de garantía para acceder a la licitación.
“Otro tema es que ni siquiera es en efectivo; es financiado a un interés mucho menor del que tienen las viviendas sociales del barrio. Creo que es del 7%”, conjetura Abal Medina, cuya ONG se opone a la construcción del nuevo estadio.
“Nuestro primer reclamo es socializar los terrenos para construir viviendas sociales. Si no que se sigan utilizando para que la gente se siga reuniendo o para jugar al fútbol. Es gente que no tiene la plata para hacerse socia del club.
Por otro lado, desde que Angelici es gestión en Boca también se cortaron las becas para la colonia para los chicos del barrio”.
Según Reporte Inmbiario, el metro cuadrado está US$ 1.400; Boca pagó 3 veces menos.
En principio, la edificación de una nueva Bombonera dependerá de un plebiscito que lanzará la dirigencia, en el que los hinchas deberán decidir si aceptan dejar de lado el actual estadio, cuya ampliación "es imposible", según asegura la dirigencia xeneize. La construcción de un nuevo estadio demandaría alrededor de US$ 300 millones.