El año pasado, Justino Compeán, vicepresidente de la Concacaf, le había deslizado a la web ESPN Deportes la primera versión del rumor: "la Copa América se jugaría cada cuatro años en Estados Unidos".
¿La Copa América se muda para siempre? Por ahora, son sólo rumores.
Y ahora, con la edición Centenario del campeonato desarrollándose en el país del norte, la posibilidad suena cada vez con más fuerza. La misma página consultó a dirigentes de la Concacaf, quienes les aseguraron que la idea es sólida y que sólo faltaría la aprobación de Conmebol.
"Conmebol pidió dar su respuesta hasta después del torneo. Pero hoy, están convencidos de que en su próximo Congreso, se aprobará", le adelantó a ESPN Deportes la fuente de Concacaf.
Pros y contras
Varios factores confluyen an la voluntad de ambas asociaciones de establecer a Estados Unidos como sede fija de la Copa América. Para empezar, la infraestructura, las plazas hoteleras, la seguridad y las comunicaciones satisfacen ampliamente los requisitos de jugadores y cuerpos técnicos.
La infraestructura de estadios es un gran punto a favor para la Concacaf.
Además, los premios por participación en la Copa América de Chile y, antes, en la de Argentina no habrían sido del agrado de los beneficiados. No sólo eso: fueron entregados a algunas federaciones sudamericanas con más de un año de demora y no siempre en su totalidad.
Los argumentos en contra de la idea también existen. Las distancias de viaje entre las diferentes sedes estadounidenses son demasiado amplias, mientras que los tickets, que antes se repartían en gran cantidad entre los patrocinadores de Conmebol, ahora fueron restringidos.
Además, no se puede dejar de tener en cuenta lo polémica que resultaría la decisión para dirigentes y público de los países de Centro y Sudamérica.