El despertar del miércoles fue agitado para Daniel Osvaldo. Es que Jimena Barón, con quien que actualmente atraviesa por una reconciliación sentimental, decidió publicar una carta abierta vía redes sociales intentando "lavar" su imagen pero también detallando comportamientos agresivos por parte del futbolista.
Barón y Osvaldo están en plena reconciliación.
“Es de público conocimiento lo que pasó entre mi pareja y yo aunque muchas cosas fueron exageradas y otras tantas también fueron mentiras de parte de gente a la que le convenía. Yo aclaré más de una vez que las agresiones que recibí fueron verbales, convenía mas para el escándalo hablar de golpes y maltratos físicos inexistentes”, describía la actriz en el texto. Vale remarcar que en el pasado Barón había sugerido ser víctima de violencia de género por parte de Osvaldo.
“Mi pareja me dejó de muy mala manera, tuvimos una última discusión muy fea y posteriormente viví días de mensajes horribles. También se fue dejándome en una casa en el Tigre que yo no podía pagar sola y a propósito se quedó con una llave para que yo no tenga la tranquilidad de estar sola”, agregó la actriz en relación a los momentos posteriores a su ruptura con el futbolista.
Las fotos del escándalo
Las fotos se viralizaron el miércoles y muestran a Osvaldo "al natural".
El mismo día, horas más tarde, un nuevo dolor de cabeza llegó para Osvaldo, cuando se publicaron fotos íntimas y chats comprometedores en la cuenta de Twitter Anti Boti (@anti_boti), la cual se dedica a “destapar” escándalos relacionados con el mundo del fútbol.
En el chat filtrado, Osvaldo llamaba "gato" a Jimena Barón.
Las imágenes, que muestran al ex delantero xeneize completamente desnudo, habrían sido enviadas a una mujer que sedujo después de su separación de Barón, y estuvieron acompañadas por chats en los que Osvaldo tildaba a la actriz de “gato”, “ventajera”, “mentirosa”, “interesada” e “infiel”.
Otro de los chats describe la desilusión de Osvaldo en relación a Barón.
Puro humo
Las cosas, sin embargo, aún tenían espacio para ponerse peores. En la noche del jueves, luego del empate que Boca consiguió frente a Nacional de Uruguay, Osvaldo se retiró aparentemente ofuscado por haber jugado sólo cinco minutos, realizó irónicas declaraciones a la prensa y prendió un cigarrillo en el baño del vestuario.
Guillermo Barros Schelotto, según relató Jorge Rial en Intrusos, golpeó la puerta del sanitario al constatar que salía humo del cubículo y lo pescó "in fraganti". Inmediatamente después, el DT llamó a una “reunión de gabinete” de urgencia en la que participaron su hermano Gustavo, Carlos Tevez, el “Cata” Díaz y Agustín Orión, y tomó la decisión final: Osvaldo debía irse de Boca.
Esta no es la primera vez que el delantero utilizó el vestuario como espacio de rebeldía. Cuando militaba en la Roma, se peleó a puño limpio con su compañero Erik Lamela luego de un cruce verbal en la cancha. Además, se rumorea que Francesco Totti, el legendario delantero romano, también lo habría encontrado fumando tras bambalinas luego de un partido.