Esta semana, la agenda noticiosa tiene al futbolista Brian Fernández como protagonista de un escandaloso chat de fuerte contenido sexual. En el mismo, amenazaba a una mujer con "ponérsela en la boca" para que no hablara "pavadas".
La problemática vida de Brian Fernández tiene varios episodios.
Sin embargo, este es apenas el eslabón más reciente de una historia regada de episodios problemáticos, donde el consumo de drogas y alcohol toma el centro de la escena.
Doping y recaída
Mientras jugaba en Racing, un control antidopaje practicado a Fernández el 10 de mayo del 2015 -luego de un partido que el equipo de Avellaneda igualó 0 a 0 frente a River- dio positivo por consumo de marihuana.
Y la misma semana, un segundo análisis arrojó la presencia de sustancias prohibidas. Esta vez, el jugador había sido testeado después de un encuentro de la Copa Libertadores, en el que Racing había enfrentado a Guaraní de Paraguay.
En aquel momento, a Fernández se le había impuesto una pena de un año que, sin embargo, terminó siendo aumentada seis meses más hasta el 9 de enero de este año. Durante ese tiempo, Fernández se rehabilitó en una clínica de la ciudad mexicana de Tijuana y de manera ambulatoria en nuestro país.
Luego de volver de su sanción, Fernández fue marginado de Racing por indisciplina.
Pero los problemas del jugador no terminaron con el fin de la sanción. El día en el que debía volver a presentarse en el predio de Racing, llegó varias horas tarde y el director técnico Diego Cocca lo eliminó del plantel que debía viajar a la pretemporada.
Días más tarde, el entrenador revisó su decisión y decidió que Fernández volviera a la primera de Racing. El delantero selló su vuelta con un gol en el clásico amistoso que el equipo jugó contra Independiente el 24 de enero.
"Lo mío es un problema psicológico"
La buena racha, de todas formas, duró muy poco: en marzo, Brian fue interceptado por un control de alcoholemia en Palermo al volante de su BMW. Luego de que el análisis diera positivo, tomó la insólita decisión de darse a la fuga dejando la documentación del vehículo en manos de la Policía.
Y a pesar de que Racing decidió no marginarlo del equipo luego de este incidente, fue el mismo Fernández quien complicó su propia situación faltando sin aviso a varios entrenamientos durante el mes de mayo. La paciencia de los dirigentes se colmó y, en un arreglo entre el equipo de Avellaneda y Sarmiento de Junín, el jugador terminó pasando al equipo que dirige Fernando "Teté" Quiroz, que pelea el descenso.
Fernández actualmente juega en Sarmiento de Junín.
"Es un chico que familiarmente pasó bastantes problemas. Su familia está separada y falleció un hermano", supo explicar en aquel momento el representante del jugador, Christian Bragarnik.
Por su parte, el mismo Fernández hizo un mea culpa reciente. "Lo mío es un problema psicológico y personal. Racing se preocupó por mí, no por el jugador, al igual que mis compañeros y familia. Yo fallé, no ellos. Tuve recaídas de actitudes, no de drogas. Hice pendejadas, faltaba por ganas de no ir a entrenar", reconoció en el programa radial Closs Continental.