Si hay algo que distingue a los argentinos en el mundo entero es su pasión y su efusividad. Y fue precisamente en el Mundial de Rusia, donde los excesos de cariño diferenciaron a los hinchas locales del resto.
Así lo demostró un fanático de la albiceleste quien no pudo mantenerse quieto en su asiento mientras corría el cronómetro en el partido contra Nigeria y donde parecía que el pase a octavos de final se escapaba.
Más de una vez recibió la advertencia de una mujer que estaba encargada de la seguridad de su sector, haciendo caso omiso a la misma.
Pese a las advertencias, todo se descontroló cuando llegó el gol de Marcos Rojo que aseguró la continuidad de la Selección Argentina en torneo del mundo.
El hincha no pudo evitar abrazar a la guardia.
Sin dudarlo abrazó a la mujer que no pudo escapar a su efusividad y comenzó a saltar festejando el tanto. La guardia no tuvo otra opción que huir de la escena.
Mientra tanto, el hincha no paró de subir y bajar por las gradas, tirándonse al piso de la alegría, mientras el estadio se caía ante el grito del gol argentino.