La dificultad para alquilar y hacer frente al costo inicial de esta operación podría comenzar a disminuirse para los millones de argentinos que no pueden acceder a su propia vivienda.
El Senado otorgó media sanción a un proyecto de ley que, entre otras cuestiones, pone un tope al precio de los alquileres, y amplía los beneficios para aquellos que alquilan una propiedad.
El proyecto contempla mejoras para los inquilinos.
El proyecto presentado por la senadora del Frente Para la Victoria, Silvina García Larraburu, podría generar, en caso de que se apruebe en Diputados, cierta rispidez entre los propietarios y las inmobiliarias, a pesar de que las primeras repercusiones de la iniciativa fueron buenas.
Así lo pudo constatar BigBang, luego de dialogar con Federico López Castromil, vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), quien se mostró a favor de la medida y analizó el alcance de la misma, a pesar de que aún resta que obtenga la aprobación definitiva.
La iniciativa podría generar dudas entre los propietarios.
En concreto, la iniciativa propone una actualización anual de los contratos a través de un índice que será proporcionado por el Indec, según la evolución de los índices de precios al consumidor (IPC) y el coeficiente de variación salarial (CVS).
La polémica se centra en que la actualización del valor del alquiler se producirá sólo si la inflación supera el 10 por ciento anual. Si no supera esa barrera, el propietario deberá esperar a que se cumplan los años de contrato para establecer un nuevo precio.
“La ley aún está en etapa de discusión pero creemos que a pesar de que la regulación de precios en general suele no funcionar, es cierto que los escalonamientos daban lugar a injusticias, tanto para un lado como para el otro”, expresó Castromil.
Muchos inquilinos pagan precios muy elevados de alquiler.
El proyecto prevé además modificaciones en el Código Civil y Comercial que obligará a pasar de dos a tres años de contrato, con el cual se busca darle más estabilidad al inquilino. A su vez, los impuestos de la propiedad, como el ABL, y las expensas extraordinarias, estarán a cargo del propietario.
Estos últimos dos puntos abren una incógnita en torno a cuál será la respuesta de los propietarios, aunque Castromil entiende que el proyecto no afectaría la actividad inmobiliaria. “Los dueños quieren alguien a largo plazo que les cuide el departamento, que cumpla con el pago y esté al día. Creo que la medida es positiva”, expresó.
En tanto, en caso de que la iniciativa obtenga luz verde en el Congreso, habrá buenas noticias para los inquilinos que no cuenten con grandes ahorros para hacer frente a los gastos iniciales. Es que la garantía no deberá superar un mes de alquiler y el dinero será devuelto obligatoriamente cuando se haga entregado la llave al finalizar el contrato. “Me parece muy justo este punto”, agrega Castromil.
Además el inquilino podría rescindir el contrato cuando guste, sin necesidad de cumplir los primeros seis meses como en la actualidad.