La pandemia de coronavirus modificó cada aspecto en la vida de las personas y, claro está, las vacaciones no son la excepción. A partir de los nuevos protocolos sanitarios y las exigencias lógicas para evitar cualquier tipo de inconveniente con el virus, son muchos los vecinos que optaron este fin de año no irse de vacaciones y, en cambio, alquilar algunos días una quinta: más baratas que un country y sin restricciones.
Cabe destacar que es más que para emprender un viaje por la Argentina este verano, o al menos para visitar las provincias de este hermoso país, se exija un seguro para COVID-19 al igual que un hisopado realizado con tres días de antelación. Al mismo tiempo, los intendentes de Mar Chiquita, Jorge Paredi; de Necochea, Arturo Rojas; y de La Costa, Cristian Cardozo, planean un verano con distanciamiento en lugares públicos como las playas.
La pandemia, la cuarentena y sobre todo la crisis económica que azota a este país generó un agotamiento extremo en los argentinos que buscan escaparse y olvidarse de los problemas al menos por unos días durante el verano. Esto llevó a muchas personas a realizar consultas en busca de la quinta ideal: debe tener jardín amplio y pileta de grandes proporciones, con un mínimo de tres dormitorios.
Pero los precios comenzaron a subir con los últimos días y las ofertas varían de acuerdo a la cantidad de m2 del terreno, el número de habitaciones, el equipamiento con el que cuenta la casa y la cotización actual del blue. También incide la localidad y el barrio donde se alquila, ya que si es en un country el costo se encarece notoriamente y pasa de tener un costo en pesos a requerir en la mayoría de los casos, un pago en dólares.
En casas quintas en Funes y Roldán, por ejemplo, un lugar estándar de dos dormitorios, terreno de 800 m2, quincho y pileta tiene un valor de $150 mil y $200 mil por todo enero. Mientras que las casas de tres dormitorios, terreno de más de 1000 m2, quincho y pileta están $200 mil y $250 mil el mes. Lugares de similares proporciones, pero en barrios cerrados, tienen un valor que oscilan entre los $350 mil y $500mil al mes.
Casas quintas, pero en Vicente López y San Isidro, pueden conseguirse a 200 mil pesos por mes. Para una casa de tres dormitorios se pagarían u$s 600 por mes. Pero a raíz de la alta demanda, los valores comenzaron a crecer, algunos hasta el punto de lo ridículo. Si bien hasta el momento se pueden conseguir lugares cerca de los 1400 dólares mensuales, otros decidieron aprovecharse de la desesperación de las personas.
Sin ir más lejos, em zona sur se ofrecen casas que van desde los 16 mil a los 20 mil pesos por día, aunque todavía se pueden encontrar algunos lugares en Ezeiza por el accesible costo de $ 7000 diarios. Pero por ejemplo, algunos alquileres en Canning ascienden a 3500 dólares mensuales por una quinta con pileta y 1200 metros cuadrados de parque. Eso sí, algunos dueños son más francos y advierten que el valor dependerá de la cotización del dólar blue durante la fecha del alquiler. En Parque Leloir, por ejemplo, se pueden conseguir lugares por $ 15.000 por día.
La pandemia causó que las inmobiliarias que trabajan en el Gran Buenos Aires empezaran a recibir llamados para conseguir casas desde septiembre y por períodos que llegan incluso a los seis meses. Los incrementos para esta temporada se ubican entre el 30% y el 40% en comparación con los precios del año pasado. A cada día que pasa hay menor oferta y este factor, junto con la alta demanda, ocasiona que los alquileres sigan aumentando.