10 Febrero de 2021 13:03
Esta semana los mercados se vieron atónitos ante la subida de una extravagante moneda digital: la Dogecoin. Se trata de una criptomoneda parecida al Bitcoin pero con la particularidad de que tiene un logo con un perro de raza shiba Inu, llamado Doge, el cual surgió gracias a un meme.
Sin embargo, la mayor sorpresa tiene que ver con la suba de esta curiosa pseudo divisa del Internet, ya que en los últimos días escaló hasta un 40%, alcanzando los 0,085 dólar por unidad; una tendencia que demuestra que podría valer más que el peso argentino.
Para entenderlo mejor, hay que saber que con 15 dogecoins se obtienen 1,10 dólares, mientras que con 150 pesos argentinos se consigue solo 1 dólar, al precio del mercado Blue.
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Aún así, no todo es tan simple, ya que la moneda virtual tiene sus riesgos. Hay que tener mucho cuidado con la inversión en criptomonedas, sobre todo porque tienen bastante volatilidad y cambian mucho de precio.
De hecho, esta criptomoneda tiene menos sustento que las más conocidas, como es el caso del bitcoin. Esto puede llevar a grandes pérdidas si no se es cauto, y por eso a la hora de invertir no habría que utilizar todo el presupuesto con el que se cuenta.
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Ahora bien, ¿puede esta moneda valer más que el peso argentino? Cuando uno comienza a comparar un dogcoin con el peso argentino, se puede afirmar que vale más uno que el otro. Simbólicamente, incluso se puede decir que la gente hoy prefiere el dogecoin antes que el peso argentino.De este modo, el terreno ganado por las criptomonedas abre definitivamente las puertas a una nueva realidad económica cuyo futuro se va tornando rápidamente en presente: la moneda digital.
El próximo proceso que vamos a ver en el mundo financiero son monedas digitales, no tanto de criptomonedas sino monedas emitidas por Estados, digitalizadas que reemplazaran al papel.
Como una de las características de las criptomonedas es la baja de costos en las transacciones, esto las hace atractivas para los países y por eso va a llegar a los mercados formales, mediante regulación estatal.