por Rafael Saralegui
02 Febrero de 2016 15:53El acuerdo anunciado hoy con los bonistas italianos implica el pago de US$ 1.350 millones en efectivo, al reconocer el pago de una tasa de interés del 50% por encima de los US$ 900 millones del capital. El acuerdo, que debe ser aprobado por el Congreso, ya comenzó a generar críticas porque no se considera del todo beneficioso para la Argentina.
“Argentina resolverá todos los reclamos con respecto a los bonos en default en poder de los individuos representados por Task Force Argentina, por el 100% del monto de capital original de los bonos afectados, más un 3% anual de interés”, informó el Gobierno al dar a conocer los términos del acuerdo.
El economista y ex diputado nacional Claudio Lozano consideró que “no hay ningún buen acuerdo. La Argentina tiene una deuda impagable que merece ser revisada”, al criticar también el acuerdo por la deuda que se realizó durante el gobierno de Néstor Kirchner, que implicaba una quita del 65% sobre el valor nominal.
“La deuda argentina está atrevesada de ilegalidades, no ha sido razonable en general nada y esta no es la excepción. Tampoco es razonable los acuerdos anunciados con los bancos por 5000 millones. Tiene que ver con una lógica de endeudamiento”, agregó Lozano en declaraciones a BigBang.
Según Lozano el acuerdo anunciado por el ministro Alfonso Prat Gay tiene un carácter “leonino” y consideró que se trata de un acuerdo inconstitucional porque no se le dio intervención al Congreso.
Leonardo Madcur, ex secretario de Coordinación del equipo económico de Roberto Lavagna, al ser consultado por el acuerdo anunciado por el Gobierno dijo que “las dos grandes cosas que sé es que hay una quita de los intereses del 65% y que el pago es cash. Hay que ver cómo se calcularon los intereses. Pueden haber algunos tecnicismos. Si la quita fue esa parece que está bien”.
Pero el economista añadió que “no me parece bueno el pago al contado; es muy peligroso. Es peligroso el precedente”. Se refirió a las negociaciones con fondos buitre que se realizan en Nueva York, ya que los holdouts podrían reclamar también un pago en efectivo, que no se podría afrontar con el estado actual de las reservas.
Madcur calculó que el monto de capital que había quedado fuera del canje era de unos US$ 6.500 millones, por lo cual si restan los 900 millones de los bonistas italianos quedan US$ 5.600 millones de capital. Pero a eso deben sumarse los intereses, que según los cálculos podrían llegar hasta US$ 15.000 o 20.000 millones.
Según Madcur el pago a los italianos no “mueve la aguja”, por el monto, pero implica un mal precedente para las negociaciones aún abiertas con los fondos que obtuvieron un fallo favorable del juez Thomas Griesa.
En la misma línea, el economista Marco Lavagna, diputado nacional por el Frente Renovador evaluó: “Hay que verlo todo en una forma más integral. Hay que buscar una acuerdo global sobre todo el monto de la deuda. Es bueno que se busque una solución, pero en forma parcial no es beneficioso”.
“Me hubiera gustado un periodo de tiempo más largo para poder pagar. Me suena que se podría haber conseguido algo mejor. Hay una quita de un 25% de los intereses, pero el pago cash de una vez no me gusta. Pero hay que ver todos los detalles”, agregó.