25 Enero de 2016 03:32
Luego de 13 años, Argentina volvió al Foro Económico Mundial de Davos. El presidente se reunió con los principales jefes de Estado y representantes de empresas multinacionales. El objetivo: reinsertar a la Argentina en el mundo, procurar inversiones, acceder a créditos y dar una señal potente de cambio. Pero también, lograr apoyos en su conflictiva negociación con los fondos buitres.
Mauricio Macri no sólo sorprendió por hablar en inglés, sino también por la histórica foto con el vicepresidente de los Estados Unidos, Joseph Biden, y con quien piensa será el líder de la oposición, Sergio Massa.
Histórico: Macri y Massa, uno de los líderes de la oposición, junto a Biden.
De todas maneras, los encuentros exprés de sólo quince minutos con, por caso, los primeros ministros David Cameron (Gran Bretaña), Manuel Valls (Francia) y Benjamin Netanyahu (Israel), la reina Máxima (Holanda) y los CEOs Tadashi Maeda (Banco de Cooperación Internacional de Japón), Ben Van Beurden (Grupo Shell) y Sheryl Sandberg (Facebook), dejaron abiertas promesas de cooperación o inversión por US$ 20.000 millones que se deberán continuar negociando.
Macri se reunió por primera vez con Benjamin Netanyahu luego del fin del Memorándum con Irán.
Entre el miércoles 20 y el viernes 22 de enero, dos frases dadas a conocer podrían servir para resumir lo que fue la primera participación de Macri en el Foro Económico.
Por un lado, el presidente reconoció que las negociaciones con los fondos buitre “no están yendo bien”, pero, por otro, el secretario del Tesoro, Jack Lew, aseguró que los Estados Unidos “dejarán de oponerse” a dar préstamos a la Argentina provenientes de los bancos multilaterales de desarrollo.
Las claves de Davos
Macri, sobre los fondos buitre: “Hasta ahora no hay resultados concretos, pero la semana que viene haremos una oferta”.
Departamento de Estado: “A partir de los progresos en materia económica, los Estados Unidos pondrán fin a su política de veto (desde 2011) de créditos hacia la Argentina. Desde ahora, cada proyecto argentino será considerado por sus propios méritos”.
El Gobierno podría anunciar la próxima semana un préstamo de entre US$ 4 y 6 mil millones por parte de bancos extranjeros, para reforzar las reservas internacionales que ayer cerraron en US$ 25.372 millones.
El CEO de Coca-Cola, Muhtar Kent, prometió invertir US$ 1.000 millones en total durante los próximos cuatro años para desarrollar infraestructura de operación y distribución e iniciativas ambientales.
El CEO de Renault-Nissan, Carlos Ghosn, confirmó que invertirá US$ 600 millones en la planta que la automotriz tiene en la localidad cordobesa de Santa Isabel para producir tres pick ups.
Estrategia anti buitres
Mientras el presidente conversaba con jefes de Estado y representantes de empresas mundiales, el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, y el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger trabajaron en paralelo para diseñar una oferta a los fondos buitre que esperan en la Justicia de Nueva York.
El Gobierno sabe que la llave para el crédito internacional es acordar con los fondos buitre.
El objetivo del Gobierno sería una quita del 30% de los intereses (que representan el 70% del total), según Lapoliticaonline.com. De lograrlo, la deuda con los fondos buitre, impaga desde 2001, se reduciría un 21%. Según el ministro de Hacienda y Finanzas, “el costo pasó de US$ 2.983 millones a US$ 9.982 millones por lavarse las manos durante doce años”. La quita sería de US$ 2.096 millones.
Paul Singer, referente de los fondos buitre, se mantiene firme en su posición.
En el Gobierno piensan ofrecer un bono a largo plazo, pero los fondos buitre mantendrían su histórica posición: cobrar al menos una parte en efectivo.
La alternativa sería reflotar la idea del presidente del Banco Macro, Jorge Brito, quien intentó fallidamente llevarla adelante el año pasado: negociar con bancos extranjeros para que compren la deuda de los fondos buitre a cambio de esos bonos.
Inversiones de Coca-Cola por US$ 1.000 millones y de Renault, por US$ 600 millones.
Cada año que pasa, los fondos buitre acumulan 9% de interés en dólares. Por eso, el presidente Mauricio Macri reconoció que las negociaciones no están tan avanzadas como él quisiera.
Es que cerrar este capítulo negro de la historia económica reciente sería la llave de oro para la Argentina pudiera, como desea el nuevo Gobierno, acceder al crédito internacional a una tasa como la que logran los países vecinos: el 5% anual.