Luego de romper el techo de los $43 y cerrar en $43,41 en la bolsa durante la jornada de ayer, el dólar abrió hoy a la baja, aunque tuvo un pico en los primeros minutos y llegó a los $43,50. Cerca del mediodía, la divisa estadounidense cotizaba en el Banco Nación a $42,30. El mercado mayorista tuvo una fuerte caída de 65 centavos y retrocedió a $41,69.
La caída lleva algo de alivio para el Gobierno luego de una agitada ronda como la de ayer, donde el dólar rompió su propio récord y cerró en $43,41. La tensa calma económica es un factor clave, debido a que una de las preocupaciones que ronda en la Casa Rosada es qué ocurriría en caso de que se repita una corrida cambiaria como las de mayo, agosto y septiembre de 2018, con la consecuente inflación y en un contexto electoral.
Ayer, el Banco Central que comanda Guido Sandleris subió las tasas a cifras récord para contener la suba del dólar. Sin embargo, no puede intervenir en el mercado desde que en octubre pasado se estableció el esquema de bandas de flotación tras el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
El dólar cayó un peso en el inicio de la jornada.
Ese esquema implica que el Central sólo puede intervenir cuando el dólar cae por debajo de la banda inferior - para comprar - o cuando perfora el techo - para vender dólares -. Hoy, la banda de intervención cambiaria es de entre $38,81 y $50,23. Mientras no se salga de esos valores, la entidad financiera no puede intervenir.
En el Gobierno explicaban que ayer se dio una situación muy especial en la que las monedas emergentes del mundo tuvieron una depreciación. Creen en un dólar más fuerte, aunque explican que debe ser de a poco, por los riesgos que podría representar una nueva corrida. En la Argentina, el dólar trepó un cuatro por ciento respecto a su valor previo. Por eso, ayer la decisión fue nuevamente subir las tasas de interés y “barrer” los pesos del mercado para que no se vayan al dólar. Así, tientan a los inversores con mayor ganancia para quienes se mantengan en la divisa local.
La tasa pasó de 50,21 % anual a 51,86 %, y los economistas no descartaban que pudiera continuar en incremento. La pregunta del millón es qué ocurrirá con el dólar, en un complejo contexto: hay creen que la suba de la divisa tendría que ser aún mayor, aunque reconocen que se debe concretar de a pequeños pasos y no mediante una devaluación de un día para el otro, que podría complicar aún más el panorama económico.