Aunque se preveía que era temporario, el ingreso de limones argentinos a Estados Unidos continuará restringido al menos por 30 días más. La medida generó gran preocupación entre el Gobierno que confiaba en que la demora se debía a un habitual proceso de aprobación fitosanitaria.
Trump hace tambalear los acuerdos firmados entre Obama y Macri.
Con la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos los acuerdos firmados por su precedesor, Barack Obama, y Mauricio Macri para que Estados Unidos volviera a importar limones y carne desde Argentina comenzaron a tambalear.
La autorización para importar limones fue originalmente postergada hasta el 27 de marzo de 2017 debido a una decisión general que realizó Trump el día de su asunción, mediante la cual postergó durante 60 días todas aquellas normas publicadas por Obama que aún no habían entrado en vigencia.
La demora se debería a la falta de autoridades en el Departamento de Agricultura de EE.UU.
El fundamento de esta nueva demora tiene que ver con que aún no fueron confirmadas las autoridades del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos y por lo tanto no han podido realizar el análisis de riesgo pertinente a la entrada de productos cosechados en otras regiones.
El Gobierno argentino está realizando un seguimiento de la situación a través del Ministerio de Agricultura y la Embajada Argentina en Washington, según altas fuentes oficiales.
La decisión de autorización de las importaciones fue realizada luego de muchos años de negociaciones técnicas, un exhaustivo análisis de riesgo que incluyó numerosas visitas a las zonas de producción y los empaques de la Argentina. La conclusión arrojó que los limones producidos en el Noroeste Argentino son seguros desde un punto de vista fitosanitario.
Atajo citrícola
La Argentina es el principal productor mundial de limones frescos con casi 1,5 millón de toneladas por año,siendo Tucumán el productor de más del 80%. Es así que, desde acá se podría vender unas 20.000 toneladas en más de US$ 20 millones a Estadios Unidos.
Al no reactivarse la importación, el sector citrícola se encuentra en alerta y muchos pensaron en el futuro de la firma San Miguel, el productor más grande del país. Sin embargo, la compañía contaba con una ventaja, ya exportaba a Estados Unidos desde sus plantas en Uruguay y Sudáfrica.
“En el pasado, Estados Unidos tenía un diferencial de precios del 60%; hoy ya no lo tiene. Por ejemplo, hoy para destinar una caja de limón a Estados Unidos tendríamos que sacar una caja de limón a un cliente europeo, y el diferencial por el cual se lo manda a Estados Unidos puede ser un delta pero no es más del 5 ó 10 por ciento”, aseguró Gonzalo Tanoira, presidente del Directorio de San Miguel a Apertura.com tiempo atrás.