"Estamos impresionados por el trabajo que hizo en sus primeros cien días", felicitó en privado y en público el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, al presidente de la Nación, Mauricio Macri, en su visita por la Argentina. El gabinete económico busca entonces transformar los elogios en inversiones productivas para el país.
La Argentina busca aprovechar la visita de Obama para concretar exportaciones a los Estados Unidos.
Por eso, el ministro de la Producción, Francisco Cabrera, se reunió con la secretaria de Comercio de los Estados Unidos, Penny Pritzker, para poner en marcha el Memorándum de Entendimiento firmado el miércoles por ambos países en relación a inversiones en el turismo, telecomunicaciones, agroindustria y energía.
Martín Lousteau es clave no sólo para conseguir financiamiento sino también para destrabar exportaciones.
"Analizamos cómo poder exportar carne, limones y otros productos y cómo pueda el EximBank promocionar inversiones estadounidenses en la Argentina", informó el ministerio de la Producción. De la reunión participaron el embajador en los Estados Unidos, Martín Lousteau, el secretario de Comercio, Miguel Braun, y el director nacional de Comercio Exterior, Shunko Rojas.
El déficit carnal
2003: + US$ 1.125,8 millones
2004: + US$ 334,1 millones
2005: + US$ 495,4 millones
2006: - US$ 224,9 millones
2007: - US$ 1.110,4 millones
2008: - US$ 1.684,5 millones
2009: - US$ 1.750,2 millones
2010: - US$ 2.512,7 millones
2011: - US$ 3.450 millones
2012: - US$ 4.367 millones
2013: - US$ 3.794,3 millones
2014: - US$ 5.079,7 millones
2015: - US$ 4.727,7 millones
En los últimos doce años, es decir, bajo los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, la Argentina acumuló un déficit comercial con los Estados Unidos de US$ 26.746 millones. Es que del superávit de US$ 1.125 millones del 2003 se pasó a un déficit de US$ 4.727 millones en el 2015.
Así, uno de los objetivo de Macri en la cumbre con Obama fue negociar una reducción gradual de la pesada herencia kirchnerista sobre el intercambio comercial entre ambos países porque más allá del relato los números no cierran. Por eso, ayer, pusieron manos a la obra.