La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) decidió declararle la guerra al amor. El organismo recaudador ordenó la clausura de 41 hoteles alojamiento en diferentes puntos del país.
Según la AFIP el motivo de las clausuras se decidieron porque, en la mayoría de los casos, los hoteles "no emitían comprobante fiscal por cada una de las ventas que realizaban" .
Es lógico: muchos de quienes concurren a los albergues transitorios son amantes y no quieren dejar rastros. Por eso, en general, no pagan con tarjeta de crédito o de débito, para que no quede registro. Por eso se paga en efectivo y no se pide factura.
Clausuraron 41 hoteles en todo el país.
En un comunicado de prensa, el organismo recaudador señaló que realizó un "procedimiento de control sobre 320 hoteles alojamientos en 19 provincias", de los cuales clausuró 41.
"Además se relevaron un total de 527 trabajadores de los cuales 154 empleados, el 29 por ciento, tenían algún tipo de irregularidad en su registración", destacó la AFIP y agregó que también "se realizaron controles de los insumos mínimos y básicos, como así también de la veracidad de los gastos que se deducían".
De todos modos, la AFIP aclaró que "para preservar la privacidad de quienes asisten a los establecimientos, la AFIP fiscalizó los comercios a través del Monitoreo Electrónico de Ventas (MEVEN) que permite controlar como si se instalara un punto fijo presencial".
La AFIP salió a la casa de evasores.
Durante los procedimientos, "se labraron 199 actas de infracción y se comprobó que 44 establecimientos no contaban con medios electrónicos de pago y la debida aceptación de las tarjetas de débito, que es obligatorio en todo el país".
La explicación del pago en efectivo, sobre todo en hoteles del interior, obedece, como se dijo a no dejar las huellas de la infidelidad. Más de una pareja se hizo añicos por los datos que aparecieron en un resumen bancario.