Desde siempre escuchaste que para tener huesos fuertes tenés que consumir calcio, ya sea por medio de los lácteos o por suplementos o alimentos que estén enriquecidos.
Así la publicidad, el marketing y hasta el consejo de los expertos en salud te convencieron de que el calcio es el aliado principal de tus huesos.
La ecuación sería: Lácteos = clacio= huesos fuertes. Pero... no es verdad.
Es que en la industria láctea caen las ventas y no ven con buenos ojos que los estudios estén mostrando que la ingesta de calcio no es directamente proporcional a la mineralización ósea. Ya existen muchas corrientes alimenticias que muestran que se puede prevenir la osteoporosis si necesidad de consumir lácteos.
Es probable que el consejo médico esté obsoleto o poco actualizado.
No hace falta tanto lácteo.
¿Cuánto calcio debés consumir?
No es un tema claro, ya que cada país recomienda una cantidad diferente de calcio a consumir por día. Pero podemos decir que los números van 700 a 1.000 miligramos por día para adultos. También algunos países recomiendan aumentar la ingesta en madres que están amamantando en hasta un 60%, mientras que en otros países no existe recomendación.
El tema está muy lejos de ser claro y las preguntas son muchas.
Hay muchas maneras de prevenir la osteoporosis.
El problema es la insistencia que recibís cada día para que aumentes el consumo de calcio. ¿Por qué? Porque aumentar la ingesta de calcio no previene las fracturas, ni los suplementos son útiles para la remineralización del hueso, a esas conclusiones llegaron dos estudios publicados por el British Medical Journal.
Entonces de nada sirven todos los yogures con calcio extra, leche súper fortificada y los productos infantiles que reseñan el contenido del mineral en su envase, ya que de todas maneras, una de cada cuatro mujeres postmenopáusicas tiene osteoporosis y el número va en aumento.
Si te gusta, está bien.
¿Cómo prevenir la osteoporosis?
Hacer actividad física (especialmente ejercicios de fuerza).
Ingesta adecuada de proteínas (especialmente en ancianos).
Mantener un nivel saludable de vitamina D.
Moderar en consumo de sal.
Consumir verdura para mantener los niveles de magnesio y vitamina K.
No beber ni fumar.
Pero el mensaje que recibís es únicamente aumentar la ingesta de calcio, a base de lácteos, que usualmente van acompañados de consumo de azúcar. Los productos lácteos y azucarados se deben evitar, sobre todo por los niños.
¡Otro mito derribado! No hace falta consumir lácteos por demás para tener huesos fuertes.