"Quiero entrar y jugar con Catalina", dijo Alan Simone en diálogo con BigBang, apenas 48 horas después de su salida de Gran Hermano. El ex participante quedó eliminado a través del "voto positivo" por ser uno de los "hermanitos" menos votados y queridos por el público. ¿Lo paradójico? Es la primera vez en la historia del reality que queda eliminado un participante sin ser votado ni una sola vez de manera negativa adentro de la casa.
Su estadía en la casa dio que hablar por ciertos puntos que luego derivaron en su eliminación. Es que, en un comienzo, el oriundo de Chivilcoy era querido en el afuera hasta que sus comentarios despectivos, desubicados y de "humor negro" hacia las mujeres fueron lo que lo fulminaron en el público. Además, mantuvo durante un largo tiempo una relación de "amigos con derechos" junto a Sabrina Cortez, que lo dejaron offside sabiendo que ella tenía un noviazgo desde hace ocho años esperándola afuera del programa.
"Me gusta porque es hermosa, pero no me enamoré", confesó sobre su relación con Sabrina. Además, admitió que ambos se prometieron esperarse afuera y ver cómo avanza su vínculo conociéndose aún más. Sin embargo, en caso de entrar en el repechaje aseguró que ingresará a la casa "sin sentimientos" y su objetivo principal ahora es "convencer" a Catalina Gorostidi de armar una estrategia para entrar juntos.
-¿Te esperabas tener este final tan pronto en Gran Hermano?
-El último día dentro de la casa ya sabía que pronto me iba a ir yo. Lo sabía por el tema de los gritos, a lo mejor me dejé llevar mucho por eso. Yo tuve unos días muy difíciles, muy tristes porque los gritos ya me afectaban demasiado y me imaginé en un momento que algo raro estaba pasando afuera y además de eso le sumaba también todo lo que lo que pasaba con Sabrina que a lo mejor a mí no me no me convenía para el juego, entonces sabía que se me venía algo de eso.
-Hubieron tres días aproximadamente que después de algunos gritos no se te veía en la casa ni tampoco se te mostraba. ¿Fue ese momento?
-Sí, pero tuve varios días medio mal. Esa tristeza me llevaba a pensar en qué estaba pasando afuera, o sea, no entendía por qué primero me gritaban cosas lindas y después no y más sabiendo que todos mis compañeros me querían y me apoyaban porque era ese cariño el que me demostraban. Yo pensaba mucho en qué pasaba con mi imagen para el afuera y eso me repercutía a ponerme mal y a enojarme por boludeces. Creo que también me aislé mucho de todos por acostarme, por estar con Sabrina entonces en un momento dejé de estar con todos.
-¿Tenía algo que ver tu vínculo con Sabrina en esa tristeza?
-Todo sumaba para eso y más por el apego que tenía con ella y por los gritos que empezaron a escucharse que decían que nos teníamos que distanciar. Ahí adentro todo te afecta el doble.
-¿Qué pensaste cuando dejaste de tener gritos positivos y se convirtieron en negativos?
-No me imaginaba mucho pero más o menos sabía que algo raro estaba pasando conmigo pero no entendía qué. Yo lo hablaba mucho con Sabrina y ella me preguntaba sobre si había algo que yo haya hecho mal en algún momento afuera o también suponíamos algunas cosas que he dicho yo ahí en la casa que capaz le había molestado a alguien, pero no sabíamos bien qué pasaba.
-Después de la placa que quedaste mano a mano con Catalina, todos tus compañeros también se preguntaban qué hiciste para tener esa repercusión negativa en el afuera...
-Es que eso mismo me pasaba a mí. Yo me di cuenta que todo me querían adentro de la casa, que todos tenían cariño hacia mí, pero eso es lo que más me llevó a pensar y por lo que decía "okey, hay algo raro fuera, no es acá el tema". Entonces me hacía mucho la cabeza.
-¿Caíste en la cuenta de que fue lo que te fulminó para el afuera?
-Si obvio, yo eso ahora lo tengo bien en claro y también además de lo dicho, me pasó en cuanto al juego, que a lo mejor me junté mucho con Sabrina y me aislé de todos los demás ahí y eso no me convino por el lado del juego de adentro. Pero bueno, más allá de eso, yo hacía lo que sentía y lo que me hacía sentir bien. Ahí adentro a veces necesitas una contención porque es muy difícil estar ahí.
-¿Te imaginabas que en el afuera te estaban cancelando por tus comentarios o pensaste en otra cosa?
-En un momento me imaginé, pero no pensé que era por eso. Pensé que era más por el tema de Sabrina con la pareja de ella y todo eso, pero no, no tanto por los comentarios. De hecho ya pedí disculpas a la gente que ofendí porque sé que está mal y le pedí disculpas a Denisse, a Catalina, a Furia y bueno, tengo que aprender muchas cosas de eso que es todo nuevo para mí. Yo vengo del campo con otras culturas, otras crianzas, es todo nuevo para mí esto. Yo sé que las cosas esas cosas, así están muy sensibles acá, así que tengo que aprender mucho.
-Igual sabes que no fuiste el único en comportarse de esa manera adentro de la casa...
-Sí, lo sé y también me enteré de la repercusión en el afuera. Es que yo sentí que el cordobés (Hernán Ontivero) fue mucho más grave que yo y encima todo lo que dijo, lo dijo en solo una semana que estuvo adentro. Pero bueno, ese no es tema mío. Yo ya pedí disculpas y trato de disculparme con todas las personas que ofendí.
-¿Crees que te consumió tu personaje dentro de la casa el haberte relacionado tanto con Sabrina?
-Yo creo que sí, pero no estoy diciendo que me arrepiento. No me arrepiento de nada y yo lo hice porque lo sentí y porque así lo quise, pero yo creo que sí, un poco sí. No creo que me haya jugado en contra su relación tampoco, creo que me jugó en contra de nuestra relación aislarme de todos por sentirme bien con ella.
-¿Qué pasaba si te quedabas adentro de la casa con Sabrina? ¿Se concretaba?
-Nosotros cuando pedimos que nos voten de manera positiva, dijimos que lo nuestro se hacía realidad en broma, matándonos de risa, todo tiene un límite y nosotros no podíamos hacer nada. Ella está en pareja y sabíamos hasta donde podíamos llegar. No íbamos a pasar los límites, adentro éramos amigos y listo.
-¿Dar el consentimiento no superó otros límites?
-Para nosotros no y para ahí adentro tampoco, quizás para el afuera sí y creo que pareció eso.
-¿No te enamoraste de Sabrina?
-No me enamoré; me gusta. Es muy linda, me gusta como es, es hermosa y me gusta pero no me enamoré. Yo siempre le hacía chistes de vivir juntos y concretar, pero mayormente son chistes entre nosotros que nos entendíamos mucho. Nosotros sabíamos cuando jodíamos, cuando no y cuanto había de broma en cada comentario.
-¿Crees que afuera van a tener otro tipo de vínculo sabiendo que su relación con Brian está prácticamente terminada?
-Sí obvio, de hecho hablamos un montón de que cuando estemos los dos afuera nos vamos a seguir juntando, viéndonos, saliendo, compartiendo cosas y después hay que conocerse acá afuera, nosotros nos conocimos adentro de un juego. Aparte nos hicimos una promesa de que si yo salía primero la iba a esperar y si ella salía primero me iba a esperar a mí.
-¿Qué pasó por tu cabeza cuando minutos antes de irte ella te dijo que si lo ves a Brian afuera le des un apretón de manos?
- Creo que claramente me lo dijo más en chiste que otra cosa. No me lo dijo así, porque sabes que yo ni siquiera lo conozco en persona así que me lo tome como un chiste. Ella sabía que si yo lo veía no lo iba a saludar. De hecho creo que si me lo cruzo no tengo por qué saludarlo porque no lo conozco y no tengo nada para hablar, está todo bien, yo no tengo problemas ni con él ni con nadie. No me pertenece a mí el tema y no me pertenece hablar con él de nada de lo que pasa ni pasó.
-¿Sentiste que jugaste con tu belleza para intentar conquistar escalonadamente a Rosina, a Denisse y por último a Sabrina?
-Yo creo que no fui buscando a ninguna de las chicas con ningún propósito. Las cosas se dieron así porque nos vamos conociendo de a poco y lleva tiempo conocerse ahí porque tenes muchas dudas y mucha desconfianza. Es como que nunca sabes si están jugando o si te están diciendo la verdad, entonces de a poco nos íbamos conociendo con todos. Con Rosina no pasó nada, si sé que hubo un shippeo en un momento pero no más que eso y con Denisse tampoco. En un momento nos soltamos, nos dijimos que nos parecíamos lindos pero quedó todo ahí, no sentí esa conexión como para estar o tener algo con alguna de ellas ni ellas conmigo. Sentí la conexión con Sabri, que me sentí muy cómodo y por eso quedé con ella. No me sentí cómodo con nadie como con ella.
-¿Cuál fue la razón verdadera por la que mandaste a placa a Rosina?
-Fue una razón entre Licha y yo que igualmente yo lo había pensado antes. La razón era para tratar de defender un poco más a Nicolás en la placa, porque yo sabía que Rosina no se iba a ir. Yo sabía eso, pero también tenía en cuenta que si se iba no me iba a causar nada, no me iba a angustiar ni a poner mal entonces por eso también la dejé en la placa. Después quedó todo bien, lo hablamos y es una persona hermosa, es muy buena, es agradable, tiene una energía tal cual como se ve, es una persona increíble. Al principio yo no sabía si era así verdaderamente o si era un juego, pero después entendí que es su personalidad.
-¿Sentiste una traición por parte del Chino cuando no te salvó de la placa?
-Sí, me enojé porque ellos todo el tiempo hablaban de ser un grupo, de estar juntos, de cuidarnos y me molestó que me haya arriesgado así. Me molestó que justo en esos días yo había empezado a estar mal, sabía que algo malo estaba pasando afuera y a él no le importó y me mandó igual. Yo le dije que no se sienta incomodo ni que sienta que me tenía que explicar nada en el momento en que me quiso dar explicaciones, pero igualmente me di cuenta que a él solo le importa Lisandro y a Lisandro solo le importa el Chino y que si tienen que arriesgar a otros lo hacen. Está bueno porque ahí todo te hace dar cuenta y abrí los ojos.
-¿Fue el puntapié para tu relación con Sabrina y alejarte de los chicos?
-Sí, puede ser un poco pero no fue tanto por eso. Yo me sentía cómodo con Sabrina, no fue solamente porque ellos me dejaron en placa, no fue tanto el motivo por la ruptura de la relación.
-¿Eras parte del Imperio Chino?
-Es algo que nunca hablé ni aclaré pero yo siempre traté de jugar solo y a la vez no decirlo tampoco, a mí me servía que me tomen parte del grupo sin decir nada, pero yo me sentía parte porque ellos me lo hacían saber y me lo decían. Igualmente, con Bautista y con Lisandro era con los que más relación y afinidad tuve adentro de la casa más allá de Sabrina.
-¿Qué autocrítica haces de tu estadía dentro de la casa?
-La verdad es que yo venía muy bien y si yo no decía esas palabras que dije que están mal, yo creo que tenía para un buen rato dentro de la casa. Creo que venía muy bien, yo tenía mucha fe y veía el cariño que me tenían mis compañeros también, así que sentía que iba saliendo bien. Pero creo que además de lo que dije, no tendría que haber estado tanto tiempo con Sabrina y tendría que haber compartido más tiempo con los demás a lo último. Pero bueno, es imposible darte cuenta ahí porque hacía lo que sentía, lo que me hacía sentir bien ahí ya sabiendo de todo lo que estaba pasando afuera conmigo.
-Si te toca entrar en el repechaje... ¿Cómo lo harías?
-Y... ya estoy loco pensando en eso. La verdad que ahora mismo no puedo definir cómo entraría porque no vi mucho, no sé qué estuvo pasando, tendría que armar estrategias y ver qué está pasando. Entraría más a jugar a pleno y no a dejarme llevar por mis sentimientos. Entraría directamente con pocos sentimientos, no dejaría de ser yo pero entraría a jugar un poco más.
-¿Con quién jugarías?
-La verdad es que no sé, no sé si entraría a jugar con los chicos, con Sabrina o con qué. Lo único que sé es que estaría bueno hablar con Cata y armar alguna estrategia con ella. Yo sé que la gente quiere que entre y sería muy bueno que armemos una estrategia entre los dos, entrar y jugar los dos juntos contra la casa.
-Y adentro te unís con Furia...
-No creo, pero no sabría decírtelo... de a poco se va dando, uno no puede planear todo para que salga todo perfecto porque puede no salir así. Pero por el momento me gustaría entrar con Cata y que juguemos todos juntos. Yo sé que ella es buena persona, buena jugadora y ve muy bien todo lo que es el juego.