Del cabezazo que no fue al beso que sí: piden la expulsión de Furia de Gran Hermano tras el violento cruce con Coty

Al igual que un partido de fútbol en el que un jugador finge una lesión, el público fanático de Gran Hermano se supera todos los días en los reclamos sobre situaciones que perjudican a sus favoritos o benefician a quienes más repudian. En un rol similar al VAR, donde los árbitros analizan las jugadas polémicas, las redes sociales y la viralización de momentos cumple un papel fundamental para esto, como se vio en el último cruce entre Constanza "Coty" Romero y Juliana "Furia" Scaglione.

Ambas jugadoras están enfrentadas desde el día que ingresó la correntina, hace menos de dos semanas. Allí, le esquivó el saludo a la popular pelada y directamente le apoyó una mano en el hombro. Además, cuando estaba afuera, aseguraba que iba a provocar a la doble de acción hasta hacerla pisar el palito y sacarla del reality show. Furia, que entendió la movida al toque, no tuvo miedo a la confrontación y hasta se sintió envalentonada con que la producción le ponga una peso pesado a disputarle su lugar.

El duelo que generó resquemor horas antes de que Scaglione deba abandonar la casa para realizarse estudios médicos por una infección urinaria, se dio mientras la gran mayoría de sus compañeros estaba en el living comedor. "¿Alguien te gritó? ¿Querés escucharme gritar?", la enfrentó Furia a Coty cuando ella hablaba con los demás. Enseguida, la correntina se paró y fue a enfrentarla como si no hubiera un mañana.

"Sí, decime. Decime. Gritame sí", le espetó Romero mientras se ponía frente contra frente contra Scaglione con mucha firmeza y violencia. "No te voy a gritar. Te voy a besar en todo caso", la interrumpió Furia, con una sonrisa ancha en la cara y con una postura bien lejana a la imposición física. "A eso viniste, a besarme. Ya me di cuenta. Otra que gusta de mí ahora", lanzó justo antes de besarle la mejilla derecha a su joven rival.

Este entredicho que volvió a demostrar que mientras Furia juega en una liga, el resto de los participantes está en otro mucho más inferior, fue motivo de que en las redes sociales haya todo tipo de debates respecto a cuál de las dos deben expulsar. Si a la correntina por haberle pegado un cabezazo -que no fue tal, aunque tampoco fue algo no violento-, o a la pelada por haber besado sin consentimiento a la otra jugadora.

Los antecedentes para que por una acción violenta se llegue a la expulsión son varios alrededor de todo el planeta y en la historia del reality, y en el caso de besar, hubo una situación similar que terminó con la salida forzada de alguien en el último GH Brasil. Lo cierto es que por más que aquí las redes sean un velorio por la cantidad de lágrimas de protesta, o una cancha de fútbol por la cantidad de insultos lanzados contra el arbitraje, nadie parece que vaya a irse de la casa más famosa del país.