¿Quién sos?
24 Febrero de 2025 08:39
La última gala de Gran Hermano (Telefe) no defraudó y mantuvo al público en vilo con una eliminación doble que dejó emociones a flor de piel y una gran dosis de incertidumbre dentro y fuera de la casa. Delfina De Lellis y Saif Yousef fueron los dos participantes que debieron despedirse del reality en una jornada marcada por giros inesperados, votaciones reñidas y un desenlace que sorprendió a todos.
Desde el inicio, la tensión se sentía en el aire. Santiago del Moro, con su característico estilo, anunciaba la salvación progresiva de los nominados, mientras la incertidumbre se apoderaba de los jugadores y sus seguidores. Con una lista de nominados que incluía a nombres fuertes como Marcelo Carro, Luciana Martínez, Juan Pablo De Vigili, Bati Larrivey, Gabriela Gianatassio, Lorenzo De Zuani y Lucía Patrone, la competencia fue feroz.
La historia de Delfina en esta edición de Gran Hermano tuvo más capítulos de lo esperado. La joven, que había sido la primera eliminada del programa, logró regresar a la casa como reemplazo de Claudio. Sin embargo, su regreso fue efímero y, una vez más, el voto del público la dejó fuera del juego. Pero la verdadera sorpresa llegó después de la eliminación. Tal como ocurrió en su primera salida, Delfina no ingresó al estudio de televisión junto a Del Moro.
Según reveló el conductor, la joven sufrió un ataque de ansiedad y decidió no subir al vehículo que traslada a los participantes eliminados al piso del programa. "No quiso subir al Cabify por un ataque de ansiedad", relató el conductor de Telefe. Su ausencia generó especulaciones y revivió el misterio de su primera eliminación, cuando tampoco quiso bajar del auto. ¿Habrá algún motivo oculto detrás de su repetida reacción?
El otro eliminado de la noche fue Saif Yousef, quien tuvo un recorrido accidentado dentro del reality. Aunque logró consolidarse como un jugador estratégico, su tiempo en la casa terminó tras recibir el menor porcentaje de votos positivos. A diferencia de Delfina, Saif sí ingresó al estudio de Gran Hermano y fue recibido por Del Moro y el público, cerrando su participación con palabras de agradecimiento y algunas indirectas hacia sus excompañeros.
Con cada gala de eliminación, Gran Hermano sigue consolidándose como el programa más visto de la televisión argentina, aunque lo hace con números que lejos están de su mejor versión. Las estrategias, alianzas y conflictos dentro de la casa mantienen en vilo a los espectadores, quienes, con su voto, deciden el destino de los participantes. La tensión entre los jugadores originales y los nuevos sigue marcando el rumbo del juego, dejando en evidencia que la permanencia en la casa no solo depende de la convivencia, sino también del favoritismo del público.
