La jugadora más popular de la actual edición de Gran Hermano, Juliana "Furia" Scaglione, tiene un gran obstáculo a superar si quiere terminar ganando el reality. Y es que si bien todos los días suma apoyo por su desenvolvimiento tan genuino dentro de la casa más famosa del país, también multiplica a sus detractores gracias a sus peleas y enfrentamientos con algunos de sus compañeros, lo que a la hora de elegir a un ganador podría jugarle en contra.
Uno de estos conflictos explotó el último martes por la noche, justo antes de que se juegue la final de la prueba del líder que ganó Nicolás Grosman. Allí, mientras charlaba con Catalina Gorostidi, Zoe Bogach y Rosina Luna Beltrán en el patio, la uruguaya le comentó que Lisandro "Licha" Navarro había comentado que los gritos que llegaban a la casa más famosa del país venían por parte de "los fans de Furia".
Esto generó el enojo de la doble de acción, que se levantó a los gritos y encaró al musculoso encargado de la cocina. "Nada que ver. ¿Qué inventás vos, tarado? Este tarado inventa todo. ¡Tarado! No vengas a decir que mi gente viene a gritar en contra de ustedes dos", rechazó en referencia a él y a Agostina Spinelli.
"¿Qué te pasa?", preguntó de forma desdeñosa Lisandro. "Me pasa que sos un mentiroso. Estoy harta de tus mentiras. Sos un tarado y sos un boludo. Y un mentiroso y un falso. Y te lo digo en la cara, porque no soy ninguna falluta como vos", rechazó Scaglione. "Falluta, ¿qué te pasa, flaca?", continuó el hombre. "Sí, no vengas a inventar cosas, porque mis furiosos no vienen a gritar para vos", disparó Furia.
"¿Pero quién sos? Te hacés la política, flaca. ¿Qué me venís a decir tarado?", cuestionó Licha. "No soy ninguna política. ¿Qué venís a meter la política en el medio?", cuestionó Juliana. "Dejá de faltarme el respeto", pidió mientras tanto Navarro. "Si tanto te molesta que sea así, jodete. Estás acá dentro. Esto es Gran Hermano, papá", lanzó Juliana.
"Qué maleducada que sos", sostuvo Licha, quien ya se notaba que dejaba que la pelada explote de enojo y se exponga ante el público. "No metas palabras en mi boca y tampoco hables de mi gente, porque no sabés ni siquiera si tengo", respondió Scaglione. "Me chupa un huevo tu gente. Me chupás un huevo, Furia", contrarrestó Lisandro.
"Sí, te recontra chupo un huevo, me doy cuenta que te chupo un huevo. Y, ¿sabés qué? Metete toda esa comida en el orto. Metétela bien en el orto, pelotudo. No hables más de mí", rechazó Juliana. "Sos una maleducada", insistió Navarro. "Sí, recontra maleducada. No soy pelotuda, sé cuándo me odian", afirmó.
Mientras tanto las cámaras de la casa registraron cómo Virginia Demo e Isabel De Negri cenaban plácidamente en el comedor, atentas al griterío. "¿Algo más? Hermosas palabras", ironizó Licha a la vuelta de la transmisión. "Sí, porque no soy falsa como vos", comparó Furia. "Sos una maleducada. Yo nunca te falté el respeto", espetó Lisandro.
"No soy ninguna maleducada. ¿Sabés lo que pasa? Te recontra molesta que alguien se te pare de manos, porque acá todos te tienen miedo, pelotudo", explicó Scaglione. "Yo no le falté el respeto acá a nadie. A nadie. Ni me peleé con nadie", argumentó Navarro. "No, sos un falso mentiroso. Metés palabras en la boca de los demás. Le decís cosas a la gente que no son. A uno le decís una cosa, al otro otra. ¿Cómo no querés que me ponga así si me tenés las pelotas llenas?", preguntó.
"¿Sabés qué pasa? Vos te inventás tu peliculita", señaló Lisandro de forma sarcástica. "No, no me invento un carajo en la cabeza nada. No me callo nada y eso te rompe las pelotas", repitió la popular jugadora, mientras su rival se iba puertas adentro en medio de murmullos y reproches en voz baja.
La escena continuó con Furia igual de intensa, pero directamente ya en diálogo de nuevo con sus amigas. "Me tiene cansada, boluda. Despreocupate. Yo se lo quería decir hace un montón de tiempo", le indicó a Rosina. "¿Qué? ¿Me voy a callar la boca? Se cree Dios y la Virgen. Dejame de joder. Acá somos todos iguales, boluda. Esto no es tu casa, es la casa de todos", añadió.
"No como más una poronga que cocine este tipo. Y no me vengan a llamar para comer, voy a comer lo que se me cante el culo. Corta. Basta. Hay comida para todos, me puedo cocinar sola. Dos meses que vengo comiendo lo que a él se le canta cocinar. Basta, loco. Porque él tiene cara de orto, hay que tener cara de orto toda la casa. Todo es así, chupame un huevo", remató Juliana.