Carla "Chula" De Stéfano, la recién salida de Gran Hermano recibió un fuerte ataque por falsa por parte de todo el panel que participa del debate porque repartió elogios para sus rivales, mientras que dentro era muy crítica con ellos, se vio opacado por los antecedentes de una de sus cuestionantes: Eliana Guercio.
Es que la vedette fue una de las más duras con la jugadora, y hasta llegó a cuestionar los llantos que había tenido por extrañar a su familia. Aunque a la hora de la doble vara y moral, la pareja de Sergio "Chiquito" Romero, parece haber olvidado sus propios antecedentes, con algunos episodios violentos que la inmortalizaron. Además, la producción del programa también cumplió su rol haciéndola parte del debate, algo que es ampliamente cuestionado en el ácido mundo de las redes sociales.
"El primer día que lloraste, yo le dije a todos: 'no le creo nada'. La verdad es que me gustaría haberte visto una lágrima por lo menos", fue uno de los primeros ataques que le lanzó Guercio a De Stéfano. "Me pareció una falta de respeto absoluto, entraste ya pensando en irte. Querías entrar, hacerte famosa y promocionar tu producto", cuestionó respecto a la verdadera intención de la ex jugadora.
La idea de que ella ingresó para promocionar su emprendimiento de muebles fue utilizada por los demás jurados que la cruzaron, como Gastón Trezeguet, Sol Pérez y Ceferino Reato, aunque ninguno de ellos la juzgó por la supuesta tristeza que le daba haberse despegado de su familia. Al menos no en el debate del último martes.
"Yo también soy madre, tengo cuatro hijos, 47 años, y sé muy bien que, a las 24 horas de haber entrado a una casa, no voy a hacer un berrinche. Y te puedo asegurar de que los adoro igual o más que vos", disparó Guercio, quien puso en duda la tristeza manifiesta que expresó De Stéfano en los primeros días y que logró darle cierta popularidad.
"Que vos hayas entrado para divertirte una rato, para mí fue una falta de respeto para todos nosotros que estamos acá, que nos despertamos temprano y hacemos un análisis de un juego que es para ganar. Me parece muy egoísta, había mucha gente que quería entrar para ganar o para cubrir alguna necesidad", agregó en su cuestionamiento hacia Carla la vedette.
En su defensa, Chula enarboló una respuesta tranquila, aunque la panelista ya estaba encarnizada contra ella. "El segundo día que llegué, agarré una foto de mi hijo y lloré... si eso fue actuado", llegó a decir. En ese instante, Guercio la interrumpió y le preguntó: "¿Tenés el síndrome del ojo seco?".
"Mirá, si no me viste las lágrimas, tenés un problema vos. De hecho, yo me tapaba y no miraba a la cámara para que me vean llorar", explicó Carla, antes de volver a ser frenada por la vedette, quien detalló información que había dado su familia. "Tus hijos dijeron que llorabas sin lágrimas", lanzó Guercio.
La memoria de Eliana parece haberse visto golpeada, ya que se muestra como si hubiera olvidado uno de los episodios que más la popularizó: los cachetazos que le dio en vivo al periodista Marcelo Polino. Si bien es cierto que pasaron casi 20 años, ya que esto se dio en Intrusos en el 2006, semejante actitud podría nublar cualquier cuestionamiento hacia una jugadora de GH.
"Si me permitís, Jorge", pidió al conductor Rial antes de que comience el reportaje. Luego se paró mientras decía "antes que nada, yo quiero" y le lanzó una serie de cachetadas que lo llevaron al panelista a irse. "¡A mí nadie me dice puta!", advirtió mientras lo hacía. "¿Sabés lo que pasa? Yo estoy harta de que este maleducado me falte el respeto", se defendió después de hacerlo y de ser interrumpida por el líder del programa.
El evento la popularizó en su momento y hasta la colocó en un lugar de conflictiva. Aunque el tiempo pasó, estuvo en Europa y volvió a la Argentina, donde encontró nuevamente un lugar en los medios. Lo cierto es que en las redes sociales muchos no la quieren y les disgusta su papel en el panel de GH.
Debido a este tema, también trajeron a la memoria la violenta actitud que tuvo con Polino. Años después, en un reencuentro en un evento, hicieron las paces con el periodista. Una acción que si bien puede ser elogiada por su perfil pacífico, en el contexto de las críticas que le hicieron a De Stéfano, fue rechazado por "doble vara", al igual que lo hicieron con la recién salida de la casa más famosa del país.