El tiempo sigue pasando, y desde hoy, ya quedan solamente dos terceras partes de los 18 participantes originales de la edición 2022 del reality show Gran Hermano. Es que ayer se fue la santafesina Juliana Díaz en un duelo muy parejo contra María Laura "Cata" Álvarez, y su salida, revolucionó distintos aspectos de la casa.
Fundamentalmente esto impactó en Maximiliano Giudici, la pareja de la chica nacida en Venado Tuerto, con quien está desde los primeros días después de que comenzó el show. El pelado cordobés quedó muy caliente con distintas cuestiones respecto de la placa y comenzó a hacer números que lo dejaron más enojado aún.
Es que, según calculó, hubo traiciones dentro de sus personas más queridas para que su novia termine nominada. Aun así, su principal enfrentamiento en este momento lo tiene con Walter "Alfa" Santiago, el hombre más grande de la casa y el fundamental apuntado por muchos de los hermanitos por su mala onda y falta de aliento durante los partidos de la Selección Argentina de fútbol.
Cabe repasar que durante el primer encuentro, cuando Argentina cayó 1 a 2 frente a Arabia Saudita, el sexagenario confesó que sus colores eran los de Estados Unidos y luego, durante el segundo partido frente a México, le pidieron que se cambie el pañuelo bandana que lleva en su cabeza porque era "mufa" y, cuando este accedió, Argentina metió los goles. Creer o reventar.
La obsesión del cordobés en este momento pasa por quedar en una placa con Alfa y sacarlo, confiando en la gente que según él afuera lo banca, algo que no pudo probar nunca hasta el momento porque no estuvo nominado. Quien sí conoció el apoyo del público fue su rival, un visitante asiduo a las placas y el que más veces fue salvado por sus compañeros líderes.
Aunque cabe destacar que con este formato donde se vota por la negativa, Alfa tiene muchas chances de abandonar la casa más famosa del país, luego de sus diversos escándalos machistas, homofóbicos y, ahora, antiargentinos.
Mientras tanto Maxi no pierde tiempo y ya comenzó a asesorarse con el más valioso auto proclamado estratega del programa, el conductor de la frodoneta Agustín Guardis. Quien también ya desarrolló su plan para lograr la placa que le convenga y tratará de influenciar a los demás para que así se dé.
Y a quien apunta esta semana el joven platense a quien apodan Frodo por el parecido con el personaje de El Señor de los Anillos, es nada más y nada menos que Romina Uhrig, la diputada.
Y no es raro que Guardis acomode los cañones contra ella, luego de que haya enfrentamientos entre ambos desde hace algunas semanas, cuando las diferencias políticas entre ella y el joven libertario se hicieron evidentes y generaron una discusión fuerte que dejó heridos en ambos lados.
Este fue el combustible fundamental para que Agustín comience a operar, como lo hizo con Maxi, contra Romina, a quien buscará ensuciar con cuestiones vinculadas a su paso por la administración pública. El por el momento participante más fuerte del juego, de acuerdo a sus salidas de placa, buscará ponerse a prueba y continuará con su show propio de hablarle a las camas.
Su jugada viene generando rechazos por sus demostraciones soberbias, aunque no es algo que por el momento trascienda de los comentarios de las redes sociales a los votos que se envían al 9009. Es cierto que sería un golpazo para él enfrentarse a una realidad que es muy probable que más temprano que tarde se desarrolle, que afuera comiencen a castigar su falta de humildad.
Y no es algo que se sostenga únicamente en la especulación, ya que de acuerdo a las votaciones en las placas de nominación, al público no le gustan para nada las personalidades creídas y que actúan de forma despectiva con los demás. Esto es lo que pagaron con sus salidas tres de los cuatro monitos (Tomás Holder, Martina Stewart Usher, Juan Reverdito), y luego Mora Jabornisky y Lucila Belén "la Tora" Villar.
También es cierto que puede sonar entretenido creer que quienes se van del programa es por la intervención divina de la correntina Coti Romero, quien, rosario en mano, vino pidiendo la salida de cada uno de sus rivales que abandonó la casa, salvo por la última salida donde la rubia había pedido la salida de Cata antes que Juliana.
Y Coti es otra de las que más viene avanzando en el juego de Gran Hermano, ya que no sólo se encarga de jugar adentro, sino que también lo hace afuera. Sin contar al evidente jugador Agustín, junto a su pareja de turno, Alexis "el Conejo" Quiroga, son quienes más vienen pensando lo que hacen y lo que no, con el fin de ganar el premio mayor.
Pero mientras la correntina los va limpiando -otra vez creer o reventar-, afuera los monitos hacen su juego pensando en el repechaje, o quizás lo más correcto sería decir que lo hacen sin pensarlo, ya que tanto Martina como la Tora festejaron en sus redes sociales que Cata aguantó la placa, pero no tuvieron en cuenta que por primera vez sale alguien que no es de ellos y que les cambia el repechaje.
Y es que a la hora de votar por la positiva a uno o una de los hermanitas que se fueron en placa, para que vuelva a la casa, ahora se tendrán que dividir los votos con la santafesina, una candidata a votar segura por parte de los odiadores de los monitos.
Ese repechaje está en camino aunque la producción todavía no lo confirmó. Lo que es un hecho es que, una vez se dé, cambiará los esquemas de la casa para siempre, ya que quien ingrese lo hará con mucha información valiosa que, si bien no podrá compartir directamente con los demás, le será de suma importancia a la hora de desenmascarar a quienes más manipulan a sus compañeros y compañeras.