por Florencia Tozzi
10 Febrero de 2024 15:52Sabrina Cortez se convirtió no sólo en la décima participante en abandonar la casa de Gran Hermano por decisión del público, sino también en una de las jugadoras de las que más se habló dentro y fuera del reality. En su primera semana dejó entrever que sería una de las que más juegos y estrategias aplicaría en el programa, pero poco a poco su imagen se fue desdibujando por una cosa en particular que -para ella- fue lo que finalmente la dejó afuera: el amor.
En diálogo con BigBang, la oriunda de San Miguel habló acerca de lo que fue para ella su estadía en el programa y cuál fue el puntapié que hizo que todas las estrategias que tenía en su mente se vean tapadas por los sentimientos. "Entré con cabeza de jugadora y sentí que no lo pude manejar, me desconecté de la casa por cosas personales", aseguró.
Su mayor conflicto fue que al entrar, ingresó contando que mantenía una relación amorosa desde hace ocho años, pero con el correr de los días Gran Hermano le cambió la perspectiva de lo que ella creía que era el amor. Es decir, la casa no sólo le cambió la vida, sino uno de sus sentimientos más profundos. "Alan era el reflejo de lo que a mí me encantaría o me venía quejando de hace años que no tenía", comentó y aclaró que durante todo su vínculo con Brian, quien ahora es su ex novio, aceptaba cosas que "no estaban buenas".
Más allá de que su estadía dentro del reality duró dos meses, la blonda ya sabe qué es lo que quiere para el futuro. En cuanto a su corazón, dejó en claro que su "prioridad" no es Alan ni tampoco lo es Brian, sino que es en un principio, ingresar en el repechaje para "jugar sola sin alianzas". Además, cuando se termine esta etapa, buscará continuar con su carrera de modelaje y rever si le sirve o no seguir en only fans.
-¿Cómo estás viviendo tus primeros días fuera de Gran Hermano?
-Son días buenos y raros. Estoy adaptándome y tratando de descansar y comer bien que es lo principal porque era lo que faltaba en la casa, la comida y el sueño. Era tremendo lo que pasaba con la comida y de hecho nos cambió la alimentación a todos y el cuerpo también, a mí particularmente no podía ir de cuerpo como iba antes y muchos otros temas como no tener frutas y verduras que eran prioridades del súper que a veces no teníamos y afectaba.
-¿Te afectaba particularmente a vos?
-Yo no era de quejarme, trataba de bancármela pero cuando me daba hambre terminaba comiendo lo que había que me hacía mal y la última semana me afectó bastante. Ahora que salí, estoy intentando de comer mejor que sé que se va a solucionar en cualquier momento. Si seguía ahí adentro sabía que en cualquier momento me iba a sentir mucho peor hasta al menos que se organice la casa con las frutas y las verduras y que sea prioridad.
-¿Hubo algo más que te haya sacado completamente de tu rutina?
-Creo que no hay otra cosa que me haya afectado tanto como la comida y el sueño, por eso ahora lo que más busco hacer afuera es eso, alimentarme bien y poder descansar. Adentro se hacía muy difícil porque el tema era todo un tema y el sueño también porque maquinas todo el día. Después de eso, no hay nada que en el afuera me esté volviendo muy loca o desestabilizándome.
-¿Con qué expectativas ingresaste a la casa y cómo viviste la eliminación a partir de eso?
-La verdad que entré con cabeza de jugadora y sentí que en un momento no lo pude manejar y me desconecté un poco de la casa por cosas personales o por cosas sin querer queriendo y el balance que hago es que más allá de que no estuvo bueno en mi juego, estuvo bueno para replantearme cosas en mi vida que son buenas y malas y que lamentablemente eso me sacó del juego de la casa, pero que es respetable. Si volviera a vivir la experiencia iría por el mismo lugar y preferiría llevarme todo eso que solo entrar y jugar.
-¿Qué sentís que te dejó puntualmente afuera de la casa?
-Yo me veía súper fuerte, que estaba recontra metida ahí pero fueron pasando cosas. La casa misma te va comiendo, la casa te mueve mucho todo el tiempo y hay que adaptarse contestemente a eso. Dormiste una siesta de más o te acostaste más temprano un día y ya cuando te levantas se dio vuelta todo, se te da vuelta el juego que venías pensando y te perdiste un montón de cosas por no estar ahí. Es tremendo eso.
-¿Por qué te eligieron para que te vayas?
-Yo creo que se habrán dado cuenta que estaba un poco desconectada del juego y que por más de que me quedé una semana más hice lo que pude en cuanto al juego, pero por ahí está claro que quizás preferían que queden los jugadores que se estaban metiendo desde el día uno. Eso por un lado y por otro lado sabía que se me juzgaba mucho por mi relación lo que hacía que las personas no me banquen afuera.
-¿Te jugó un poco en contra el hecho de haberte aislado de la casa?
-Claramente sí. En esa parte fue inmanejable para mí porque procesé un montón de cosas de mi vida, me perdí un montón de cosas que hicieron al juego y que yo no fui parte y ahí es como dice Santi del Moro, ahí es una carrera y el que se queda atrás, se queda. Igual, le quiero meter para el repechaje.
-¿Sentís que te influyó un poco en tu estadía la pelea que tuviste en los primeros días con Furia?
-La realidad es que esa pelea no fue por decisión propia. Yo la iba a evitar pero Furia me pasó por al lado, se rió y me hizo saltar. A partir de ahí, la casa se dividió y después yo me di cuenta de que ella iba con todo hacia mí y a mucha gente le molestaba eso, le molestaba que yo haya ganado el liderazgo, que había sido una de las primeras participantes que se había peleado... Me di cuenta que la casa jugaba desde ese lado entonces pensé en bajar un poco todo eso porque no me servía a mí como estrategia.
-¿Pensabas que la pelea no servía?
-A mí me sirvió porque me mostró más fuerte y creó dos bandos que estuvieron buenos también y la casa se dividió. A partir de eso yo me fui para el lado de los chicos y trajo un montón de temas interesantes no solo para el afuera sino adentro de la casa. Pero bueno, lo malo de eso también fue que yo tuve que agachar la cabeza porque si no era candidata para ser votada una y otra vez.
-¿Por qué crees que pegaste más afinidad con los varones que con las chicas?
-A mí lo que me pasó después de esa pelea que hubo es que yo casi no podía entrar al cuarto porque se me decían un montón de cosas todo el tiempo como "que no hablen que está la chusma" y así un montón de cosas repetitivas que era todo el tiempo patadas y patadas. Entonces, no sé si se veía o no, pero yo era una de las últimas que se dormía porque entraba a lo último a mi cuarto, me acostaba en mi cama que era la última de todas y al otro día me levantaba, me iba y no volvía a entrar. Los chicos fueron los que me abrieron las puertas y por eso me metí tanto en el grupo. Yo al principio decía que nos banquemos entre las pibas pensando en que podía lograr tener una buena relación con Furia que no la tuve ni la quiero tener la verdad. Somos bandos opuestos y no voy a ser una más de las que come de su mano. La casa se dividió porque la gente tomó partido por esta pelea y los pibes salieron a defenderme y a partir de ahí Furia decía que me llevé a los pibes de mi lado pero ellos mismos tomaron partido.
-¿Quiénes eran las chicas que te bardeaban?
-Chula; Catalina; Furia y Agostina. Ellas eran las que más me bardeaban, las furiosas. Cuando estaban todas juntas se potenciaban y hacían su vida y les chupaba un huevo si maltrataban a alguien o no, pero se quejaban de si alguien las ignoraba aunque en conjunto hacían lo que querían. A mí eso me lastimaba y yo no quería volver a saltar así que me lo fumaba y después rajaba. Yo sentía que mi juego tenía que ir por ese lado porque si no iba a ser la oveja negra de la casa siempre y que me iban a apuntar con el dedo siempre, creo que me salió bien porque zafé de muchas placas.
-¿Qué pasó después de la charla que tuvieron con Furia para reconciliarse?
-Lo que pasa es que un poco mi juego era que Furia no pudiera conmigo y ella de todos los participantes conoce a todos y cada uno la personalidad, cómo puede jugar, como puede aprovecharse, porque es muy inteligente y muy táctica. Y mi juego o estrategia era que ella no supiera nada de mí, que no pueda manejarme, y si yo me abría a tener una relación con ella, no me servía de nada. Eso quizás me hubiese servido en otro momento, pero no lo hice. No hubo una sola persona dentro de la casa que no le haya dado su tiempo, su espacio, que no la haya querido conocer, todo. Yo nunca. No tenía conversaciones, la ignoraba o ella a mí, y yo sentía que eso en algún momento me iba a servir de estrategia porque del bando de ella no iba a estar.
-¿Te debilitó un poco la salida de Isabel?
-La verdad es que los últimos días yo ya no estaba tan pegada a Isabel por un poco de que te acercabas y era todo el tiempo hablar de juego o de la manera en la que ella hablaba de los participantes o del juego no me gustaba. En ese momento me empecé a juntar más con Alan, pero cuando se fue me dolió por saber que se fue mi aliada pero no me debilitó. Quizás si ella se quedaba, yo no me aislaba tanto con Alan.
-¿Te apegaste a Alan buscando un nuevo aliado?
-Sí, realmente Isabel era una de las personas de las que yo podía confiar en serio. Sentía que ella era la que me iba a bancar y estar y que podía ser mi segunda e incluso era una de las pocas que no bajaba los brazos con el tema de Furia. Yo no iba a estar del lado de Furia, no iba a comer de su mano ni nada por más de que me dijeran que afuera era fuerte. Ese era mi juego, no aliarme a Furia bajo ningún juego. Creo que Isabel, Alan y Emmanuel eran los que más confianza me daban hasta que bueno, con Emma pasaron cosas.
-¿Qué fue lo que te apartó de Emmanuel?
-Yo con Emma tenía buena relación porque me hacía reír mucho y la verdad es que la pasaba bien. El tiempo adentro tiene que divertirte porque estás encerrado y él era una de las personas con las que yo la pasaba muy bien. El tema es que cuando a Licha le gritaron cornudo, él todo el tiempo nombraba lo que no había que decir. Ahí yo le dije que deje de llevar y traer y armó un lio en toda la casa. Fue a Furia y le dijo que iba a empezar a estar de su lado, fue a Licha y le dijo que yo no le quería decir nada, fue a Agos y le dijo calienta pij... y así sucesivamente hasta que dio vuelta toda la casa. Ahí yo me di cuenta que me moría de risa con él pero tenía cero confianza. De hecho yo lo voté en una placa y quedamos en que yo no tenía confianza pero que podíamos reconstruir el vínculo. Después le di mi voto de confianza para el voto positivo pero terminó en que nos íbamos a aliar cuando se fue Alan y fue él el que me hizo reingresar en el juego. Por eso yo tenía pensado seguir jugando con él, con Manzana y con Joel.
-Emmanuel siempre fue bastante criticado afuera por eso...
-Nosotros dentro de la casa leíamos todo lo contrario. O sea, como siempre era de los primeros en salir de la placa, él solamente ve que es fuerte afuera. A mí, viendo eso, me servía volver a confiar y tener un lugar ahí. Me parecía muy inteligente como se estaba manejando Joel y Manzana me parece una persona muy analista, así que re hubiese jugado ahí porque podría haber sido interesante.
-¿Qué lazo te unía con Joel afuera?
-Nos conocimos porque yo un día estaba tomando mates en un corredor que hay en San Miguel y él pasó, se acercó, yo estaba ahí con mi hermana y nos pidió un mate. A partir de ahí, nos seguimos en Instagram y alguna vez hablamos, nos reaccionamos alguna historia o algo así, pero la verdad es que esa es la poca relación que tenía afuera. Cuando yo entré y la primera persona que vi fue él, dije "no puedo creer que haya una persona de San Miguel acá". Pero también me enteré que Rosina había tenido una relación fuera con él y eso es más heavy.
-¿Cuándo entraste en ningún momento pensaste en unirte con él?
-En realidad lo vi todo lo contrario. Sentí que como al conocerlo, yo podía jugar con un montón de personas antes que con él y que cuando quedemos pocos, íbamos a confiar entre nosotros porque ya nos conocíamos. De hecho él me decía que yo no le daba bola por eso de que yo no le prestaba atención. Yo me interesaba más en todos los demás y después iba a ir con él, de hecho así fue.
-¿Cuál es tu situación sentimental actual?
-La realidad es que por el momento no hablé mucho y siento que tengo que sentarme a hablar con Brian para cerrar el tema o para lo que sea, pero nos debemos una buena charla y después lo que me pase particularmente. Lo que sí se es que hoy no es prioridad. Por el momento tengo que cerrar un montón de cosas y después pensar en mis sentimientos. Además tengo una semana heavy y no estoy concentrada en Brian, partiendo de eso.
-¿Por qué decís que Brian quizás no te entendía o no te acompañaba?
-Así era nuestra relación, a eso me adapté y eso acepté durante ocho años. Seguramente había un montón de cosas buenas que hacían que yo me quede ahí bancando eso que no estaba bueno. Es algo que siempre me afectó de la relación y quizás cuando me sentaba a procesarlo me quedaba en todas las cosas buenas que era lo que hacían que yo elija la relación. Pero bueno, la casa sola fue lo que me hizo saltar y ver la realidad, reflejar lo que me pasaba y en algún momento me tengo que hacer cargo de lo que me pasaba.
-¿Sentís que en cierto punto Gran Hermano te ayudó a salir de lugares de los que no podías?
-Sí, ni hablar. Obviamente que sí porque procesé cosas que ni me interesaban procesar o que evadí miles de veces. Veremos cuando todo se tranquilice un poco como termino resolviendo un montón de cosas. Hoy la prioridad es disfrutar toda esta parte, lo lindo de toda esta experiencia, meterle al repechaje y todo eso que no tiene que ver ni con Brian ni con Alan.
-¿Un poco influyó la personalidad de Alan en darte cuenta de todo esto?
-Sí, ni hablar. Alan era el reflejo de lo que a mí me encantaría o me venía quejando de hace años que no tenía. Entonces, ver que una persona sí puede hacer todas cosas por vos... más allá de lo que se habla afuera, obvio, del sí estoy o no con él, si estoy enamorada o no... fuera de todo eso, darte cuenta que una persona realmente se puede preocupar por vos y darte ese lugar, me hizo despertar un montón de cosas y darme cuenta de un montón de cosas que adentro de la casa no podía decidir ni definir. Por eso acá afuera me quedan un montón de cosas por hablar y por ver con Brian. Creo que todo pasa por algo y por algo todo esto tenía que suceder.
-¿Sentís que podrías vincularte en algo serio con Alan?
-La verdad es que es medio heavy eso porque mi prioridad no está en Alan en este momento y calculo que no lo estará en un par de semanas. Siento que se vienen muchas cosas muy lindas como para que él no las disfrute por pensar si me tiene que esperar o viceversa. Me parece que lo importante es que fluya y que pase lo que tenga que pasar. La verdad es que eso es en lo que menos pienso. Me hizo ver un montón de cosas pero también creo que él tampoco está esperando que yo le diga nada, se tiene que dar, que fluir.
-¿Crees que los podrían elegir a ambos para ingresar?
-Para mí no, para mí él es candidato a ser elegido en la casa porque lo re querían por el buen pibe que era, pero en el afuera se va a elegir otra cosa y no a nosotros dos juntos justamente. O sea que si entramos sería por distintos lados y de hecho estoy completamente segura.
-¿Jugarías con él si entras?
-Entraría a jugar sola y obviamente que si él está adentro, es mi persona de confianza y obviamente jugaría con él pero apostando a la estrategia y repechaje, entraría a jugar sola. Con el correr de los días voy a ir detectando por dónde ir. En primera instancia es jugar sola y después ver quienes van ingresando, ver las alianzas...
-¿Y después de Gran Hermano? ¿Cuál crees que es tu camino?
-Yo antes de entrar a Gran Hermano antes del Only Fans, trabajaba de modelo pero desde hace años y siendo influencer de las redes. Creo que me gustaría seguir por ese lado. El only la verdad no tengo ni idea y quiero ver qué otra faceta despierto acá afuera y por ahí me convocan para algo que esté bueno y que les cope arriesgarme a probar. Creo que estoy dispuesta a eso. Calculo que con lo del modelaje voy a continuar, eso sí.
-Tu mamá había declarado que no sabía que tenías Only Fans y se sorprendió por eso. ¿Es cierto que era algo oculto?
-Ella sabía, tendría que ver cómo lo dijo pero ella lo sabía. Mi familia fue la primera en saber que me iba abrir porque obviamente que es contenido y mi familia es lo más importante que tengo, así que si mi papá y mi mamá me dicen "hace lo que quieras, tenés 29 años, las consecuencias las vas a tener vos", para mí es una súper aprobación de dejar todo en claro. Saber, sabían. Quizás hay otra cosa que no sabía, se me ocurre.
-¿Por qué tomaste la decisión de contárselo?
-Yo cuando me lo abrí, cuando empecé, eran fotos de lencería y después lo único que se vieron fueron las tetas, otra cosa no se ve. Por eso también me arriesgué a meterme a Gran Hermano, la verdad es que no iban a ver nada raro y no me iba a dar vergüenza si hubiese hecho más o si hubiese hecho menos. Se los conté porque soy una persona muy sincera y porque además quiero que mi familia sepa lo que hago.
-Si tuvieses que nominar hoy mismo. ¿A quién le das tus puntos?
-A Manzana para que se conforme mejor la placa y a Furia por si algún cagón no la nomina, pero más que nada porque quiero ver una placa de ellos dos para ver qué es lo que pasa. A Manzana incluso se los di por si en la casa no se animaban a nominarlo.
-¿Quién gana la placa de esos dos?
-Está peleado, adentro lo veíamos muy peleado y afuera parece que también. Creo que hay más votos para el lado de Furia, positivos, pero igualmente sé que está peleado.
-Más allá de lo que vos quisieras que pase... ¿A quiénes ves en la final?
-Yo creo que puede llegar Rosina por la personalidad que tiene y porque es una persona que van a ir nominando y a ella la van a ir dejando e incluso si la nominan la gente de afuera la va a dejar por cómo es ella, que la súper veo en la final, y creería que Manzana o Furia, depende cuál de los dos queda en el camino depende de esta guerra que tienen. Creo que alguno de los dos se va a sacar y va a terminar siendo eliminado.