Conocido como “La Noche de brujas”, Halloween es un festival que se celebra los 31 de octubre de cada año, cuando se celebra “la unión o extrema cercanía del mundo de los vivos y el reino de los muertos”. Y, aunque los disfraces clásicos siguen vigentes, los del “Chapo” Guzmán y el polémico precandidato republicano Donald Trump se convirtieron en una sensación en México y son los más vendidos hasta esta fecha.
El Chapo Guzmán se escapó a través de un túnel debajo de su bañera.
"Nos dieron la oportunidad de que lo diseñara con el apoyo de mis compañeros y ahora resulta que es de las piezas que más se ha llegado a vender en estas fechas", destacó Héctor Bustos, diseñador de la empresa Jiutepec. El rostro es idéntico: posee el bigote negro, el flequillo sobre la frente y los ojos pequeños del narcotraficante que se fugó 11 de julio del penal de máxima seguridad del Altiplano y sigue prófugo.
Pero el disfraz no es solamente la divertida máscara. Junto al antifaz, se vende un jovial traje a rayas y un número escrito del lado derecho como el que usan los presos. Y para que el conjunto resulte más entretenido, le agregaron en la espalda la leyenda: “No era penal de alta seguridad”.
El disfraz completo del “Chapo” incluye la máscara y el traje de preso.
El director de “Caretas REV”, Diego Esponda, explicó que “no se trata de vanagloriar a un criminal responsable de miles de muertes”, sino realizar un llamado de atención al gobierno “que lo agarra y se les escapa”.
El antifaz es una copia exacta de la del narco más buscado del momento.
La careta del narco mexicano no es la única que se vende y es un total éxito. Muchísimo menos realista y con una inmensa boca abierta con los dientes desproporcionados, la máscara de Donald Trump también es récord en ventas.
Los mexicanos se burlan de Trump por sus comentarios racistas.
Esponda expresó que es "el personaje más odiado en este momento en México" por sus comentarios racistas hacia los habitantes de este país cuando anunció en junio su candidatura a la presidencia de Estados Unidos.
La máscara del precandidato republicano es en versión caricatura.
Ambos disfraces se venden muy bien a través de Internet, en México, EE.UU. y Canadá. Y se han vendido miles para el Halloween que se avecina.