24 Abril de 2015 06:53
La Fiscalía de Cagliari (Cerdeña), que condujo las investigaciones, explicó que en sus pesquisas encontraron "señales de la preparación de un posible atentado en el Vaticano en 2010".
Según el fiscal Mauro Mura, analizando las interceptaciones durante los años que duró la investigación descubrieron la hipótesis de un proyecto de atentado en el Vaticano en marzo de 2010, durante la permanencia en Italia de un presunto kamikaze de origen paquistaní. Mura subrayó en una rueda de prensa que no había nada previsto, sino que sólo se hablaba de una hipótesis de atentado, en una plaza muy concurrida informó la agencia de noticias EFE.
Estas revelaciones surgieron durante las investigaciones que iniciaron en 2009 para fortalecer la seguridad por la celebración de la cumbre del G8 en la localidad sarda de La Maddalena.
Los fiscales comunicaron hoy que emitieron 20 órdenes de detención pero que finalmente pudieron arrestar a nueve personas, ocho paquistaníes y un afgano, mientras otros tres están desaparecidos y el resto abandonaron ya Italia.
Sospechan que planeaban perpetrar un atentado suicida en una de las plazas más concurridas por los fieles.
Entre los señalados se encuentran incluidos dos miembros de Al Qaeda que habrían formado parte de un equipo de apoyo y protección al antiguo líder de la organización, Osama ben Laden, en Pakistán, donde fue asesinado a tiros por fuerzas especiales estadounidenses que ingresaron ilegalmente a territorio paquistaní.
Las detenciones se produjeron en las ciudades de Sassari, Bérgamo, Macerata, Roma, Frosinone y Foggia, y a los arrestados se les acusa de "actos terroristas en el extranjero" y de "favorecer la inmigración clandestina".
El Imán de Bérgamo fue sindicado como uno de los dirigentes de la red terrorista en la zona.
Según los investigadores, esta célula es responsable de varios atentados y sabotajes perpetrados en Pakistán, incluido un ataque contra un bazar de Peshawar que mató a más de 100 personas el 28 de octubre de 2009,
La misma célula participó
en el atentado en un bazar de Pakistán, que mató a más de 100 personas en 2009,
En estos años también se pudo constatar que la organización tenía a su disposición armas y que
reclutaba
a personas para enviarlas a cometer atentados en
Pakistán
y
Afganistán
, y que después regresaban a Italia.
Los investigadores señalan a un imán de Bérgamo (norte de Italia) del que aún no facilitaron el nombre, como el principal responsable de recaudar fondos en algunas ciudades entre las comunidades paquistaníes y afganas, que eran después enviados a estos países para cometer atentados.