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Brasil después de Dilma: el vice Temer asume el gobierno de un país en crisis

El vicepresidente asume el Gobierno por 180 días, mientras Rousseff será juzgada en un polémico juicio político. Un país dividido. Lo más importante de su discurso.

12 Mayo de 2016 18:13
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Minutos después que el secretario del Senado Vicentinho Alves anunciara a la presidenta Dilma Rousseff la decisión de suspenderla del cargo para iniciar un juicio político en su contra, el vicepresidente Michel Temer firmó la notificación en la que asume de forma interina la presidencia de Brasil.

Y ahora, asume su cargo formalmente en Brasilia, rodeado de sus ministros y todo el sector político que esmeriló a Dilma durante meses.

La notificación, firmada por el titular del Senado, Renan Calheiros, faculta a Temer como presidente durante los próximos 180 días, período en el cual la Cámara Alta debatirá si destituye a Rousseff o la permite volver al cargo.

Dilma y Rousseff, en otros tiempos.

El "peso pesado" de su Gobierno será, como ya se intuía, el designado titular de Hacienda, es Henrique Meirelles, ex presidente del Banco Central durante el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.

También será un referente de su Gabinete el ministro de Relaciones Exteriores, José Serra, miembro del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), y quien fue acérrimo opositor del Gobierno de Rousseff. 

Los demás cargos ministeriales fueron repartidos entre partidos opositores al Gobierno de Dilma y hasta ex aliados que rompieron la alianza con el Partido de los Trabajadores (PT) antes del proceso de impeachment.

El flamante presidente de Brasil anunció "reformas" a la economía, que está "en caída libre".

El discurso de asunción: lo destacado

"Estamos frente a una crisis que debemos enfrentar juntos y salir adelante garantizando el crecimiento y la inversión".

"Brasil sigue siendo un país pobre".

"Es imprescindible realizar reformas económicas profundas para generar empleo y atraer inversiones. Para ello primero hay que rescatar la credibilidad de Brasil y del gobierno, tanto en casa como en el mundo".

"Trabajaremos con todas las áreas productivas, porque el Estado no puede hacer todo. Su responsabilidad es la educación, la salud y la seguridad, para el resto debemos compartir esas responsabilidades".

"Los proyectos sociales en marcha deben ser consolidados y mejorados. Cuando asume un gobierno no tiene que destruir lo que hizo el anterior".

"Todo el pueblo brasileño sabe que tenemos un compromiso y la necesidad de realizar reformas económicas y en la administración pública. vamos a sentar los pilares para el futuro.

"Yo fui elegido por el pueblo y respeto las instituciones y el proceso  que se está llevando adelante".

"Es imprescindible iniciar un trabajo que conlleve al entendimiento del pueblo brasileño, y el Congreso es el lugar donde se escuchan todas las voces y  representa a todos".

"Para lograr la gobernabilidad el pueblo debe involucrarse. Y debemos ser más eficaces"

"Vivimos la peor situación económica de la historia: 11 millones de desempleados, inflación de dos dígitos y caída de inversiones y crecimiento. la economía está en caída libre".

"Hay que balancear las cuentas públicas y reducir el déficit y enfrentar la corrupción. es necesario pacificar la nación". 

Corrupción, reformas económicas y fomento a las inversiones y a la creación de empleo, el eje de su discurso.