La victoria de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales de Francia sedó la convulsionada actualidad política y económica de la Unión Europea (UE). Su llegada al poder tras vencer a la candidata ultranacionalista Marine Le Pen garantizó la continuidad de la asociación económica de los países del viejo continente y alimenta las expectativas sobre un posible acuerdo de libre comercio con el Mercosur que beneficiaría a la Argentina.
Macron garantizará la continuidad de la Unión Europea.
Con la llegada de Macron al poder, la Unión Europea vuelve a concentrar sus energías en las negociaciones con Gran Bretaña para acordar su salida del bloque económico, que podrían costarle al país europeo más de 100.000 millones de euros.
Las ideas de Macron son diametralmente opuestas a las de Le Pen, quien quería abandonar de inmediato el euro para dar inicio a un programa ultranacionalista que provocaría una ruptura histórica entre las relaciones bilaterales y económicas entre Francia y Alemania.
La victoria de Le Pen hubiese significado una ruptura del bloque económico.
Lo cierto es que la alianza franco alemana sostiene el equilibrio político y económico actual de la UE y ahora Macron está decidido a evitar que el Brexit se convierta en un modelo a imitar para otros países de la región. Su modelo económico aún no está claro, aunque si es preciso que reforzará los vínculos comerciales con su principal socio, Alemania.
En la Argentina el impacto es indirecto, aunque la llegada de Macron es mucho más beneficiosa que un posible gobierno de Le Pen y su programa de proteccionismo salvaje. Lo cierto es que la continuidad de la UE deja abierta la posibilidad de un posible acuerdo comercial de libre comercio entre esa región y el Mercosur, pese a que esta posibilidad aún está lejos de ser una prioridad para el viejo continente.
Crece la posibilidad de un acuerdo comercial entre el Mercosur y la UE.
Analistas internacionales coincidieron en diálogo con BigBang que Macron no vería con malos ojos un posible vínculo comercial entre ambos continentes pero resaltan que el mayor rechazo al acuerdo proviene de los agricultores franceses, quienes no van a aceptar una reducción de sus subsidios para entregárselos a los países sudamericanos.
Por otro lado, las elecciones legislativas de los próximos meses en Francia se convertirán en otro punto de inflexión en la vida política de Macron, quien le pidió apoyo al pueblo francés para lograr un Parlamento con mayoría que garantice la gobernabilidad de su gestión.