La muerte del león más famoso de Zimbawe, y quizás del mundo, sigue repercutiendo a pesar del tiempo transcurrido. “Cecil” cayó a manos de un dentista estadounidense, Walter James Palmer, quien pagó 50.000 euros para darle caza. Lamentablemente, vuelve a surgir un episodio similar.
Un cazador alemán asesinó a uno de los elefantes más majestuosos y considerado “un tesoro nacional” por su gran tamaño. El hecho reavivó la polémica sobre la caza indiscriminada en África, tres meses después de la muerte del emblemático león Cecil.
El cazador fotografió su “trofeo”.
El elefante tenía más de 50 años y fue asesinado cerca del Parque Nacional Gonarezhou de Zimbawe durante una "cacería legal", en la que participó un alemán que estaba de safari, informaron hoy los conservacionistas de la reserva, en el sureste del país y muy próximo a Sudáfrica.
"Los colmillos del elefante eran muy grandes, tenían un peso 55 kilos y los arrastraba por el suelo cuando caminaba", explicó el vocero de la organización de derechos de los animales Zimbabwe Conservation Task Force, Johnny Rodrigues.
Algunos expertos detallan que los colmillos del elefante abatido, son “los más grandes que se han visto nunca en la región”.
El animal era considerado un “tesoro nacional”.
El animal murió en el coto de caza Malapati, en Zimbabwe. Se encontraba fuera del parque nacional y, por tanto, su caza era legal, aseguró Rodrigues.
"No sabemos si el elefante vivía en el Parque Nacional Kruger o en Zimbabwe, pero podemos asegurar que el animal estaba en la zona de safari cuando fue abatido", explicó.
40 mil elefantes mueren cada año en África por el contrabando de marfil.
El alemán pagó U$S 60.000 para realizar la caza del animal, según informó el diario The Telegraph.
"Nunca antes habíamos visto un animal tan impresionante. Al igual que el emblemático león Cecil, era un tesoro nacional que debería haber sido protegido y no matado", dijo el presidente de la asociación de organizadores de safari en Zimbabue, Emmanuel Fundira.
300 elefantes murieron en el año 2014 por cianuro.
En los últimos días, la justicia determinó que no procesará judicialmente al estadounidense que asesinó al león famoso por su melena negra. "Sus papeles estaban en regla" e “ignoraba que cometía una infracción”, expresó.
El león, de 13 años de edad, fue atraído con una presa amarrada a un vehículo como cebo para abatirlo fuera del parque, de modo que técnicamente ya no era ilegal cazarlo.
La polémica por la caza indiscriminada
En las últimas tres semanas, 40 elefantes fueron intoxicados con cianuro en los alrededores del Parque Nacional de Hwange y el lago Kariba. Se trató de una búsqueda desesperada por marfil de cazadores furtivos, afirmaron las autoridades.
Un elefante envenenado en Aceh Jaya, en Indonesia, otro de los lugares donde suelen aparecer paquidermos muertos.
El lunes la ministra de Medio Ambiente, Agua y Clima, Oppah Muchinguri, culpó el aumento de la cacería ilegal a la prohibición de la caza deportiva del elefante zimbabuense por Estados Unidos.
"Toda esta cacería ilegal es a causa de las políticas estadounidenses, que prohíben la cacería deportiva. Un elefante costaría U$S 120.000 en la cacería deportiva, pero un turista sólo paga U$S 10 para ver al mismo elefante", dijo y agregó que el dinero de la cacería deportiva es indispensable para los esfuerzos de conservación.
Su PIB por cápita es el tercero más bajo del mundo.
La hiperinflación de Zimbawe es otra de las razones que afecta a la caza en el país. El Banco Central del país africano decidió retirar su moneda de la circulación tras haber perdido todo su valor como consecuencia de un proceso de inflación.
El país africano es uno de los más pobres del mundo y es por esta razón que más de 30 mil elefantes mueren cada año a causa del contrabando de colmillos, destinados esencialmente al mercado clandestino chino.