La cercanía de los Juegos Olímpicos genera ansiedad extrema en las fuerzas de seguridad brasileñas, que extreman cuidados y vigilancia sabiendo que el mundo los pondrá durante varios días bajo la lupa.
Kalaoun, en una fotografía publicada por la prensa brasileña.
Así, la semana pasada, 12 personas fueron apresadas bajo la sospecha de planear una serie de atentados terroristas que iban a sucederse en el momento de la competencia. Y hoy, en Río de Janeiro, otro hombre fue detenido, acusado de expresar simpatías con grupos extremistas en la redes sociales.
Identificado como Chaer Kalaoun, el sospechoso es brasileño y musulmán, tiene 28 años, y es descendiente de inmigrantes libaneses. Ya había sido puesto bajo vigilancia por los servicios de inteligencia de Estados Unidos a causa de los elogios virtuales que le prodigaba al Estado Islámico.
Mientras tanto, Brasil ya ordenó la movilización de 40.000 militares para reforzar la seguridad durante los Juegos Olímpicos, durante los cuales pasarán sólo por Río de Janeiro unas 700.000 personas.