En EE.UU. se los conoce como survivalistas de elite. Son millonarios, la mayoría viven en California -Silicon Valley- y Nueva York tienen cierta conciencia ecológica y social, y miran el presente sociopolítico de su país con terror. Le temen a Trump y a lo que pueda llegar a suceder en los próximos años.
Vaticinan años de inestabilidad social y política de la mano de Trump.
Los survivalistas tienen un plan: irse a vivir a Nueva Zelanda, una reacción ante lo que consideran un inminente "derrumbe de la civilización", según un artículo de 'The New Yorker'.
El éxodo parece estar en marcha. Las adquisiciones por parte de estadounidenses de propiedades en el país de Oceanía se han incrementado exponencialmente. Solo en los últimos diez meses de 2016, compraron en Nueva Zelanda más de cuatro veces la superficie de tierra adquirida en el mismo período del año 2015.
Auckland, la ciudad más grande del estado..
Empresarios como Reid Hoffman, el cofundador de la red social de profesionales LinkedIn, considera que cerca de la mitad de los habitantes de Silicon Valley han pensado en mudarse, especialmente tras el crecimiento de un sentimiento de antipatía mundial hacia las 'élites' sociales, que ha cobrado fuerza con recientes eventos como el 'Brexit' o la elección de Donald Trump.
Reid Hoffman afirma que la mitad de Silicon Valley quiere mudarse.
El último que apague la luz
En los siete días posteriores a la elección de Trump, 13.401 estadounidenses iniciaron el proceso de adquisición de una residencia en Nueva Zelanda, una cifra que es 17 veces mayor al promedio.
Preocupación entre los millonarios tecnológicos de Silicon Valley.
Este hecho, a su vez, produjo un efecto contrario en Nueva Zelanda, donde hay un debate sobre la posible prohibición de la venta del territorio nacional a extranjeros y particularmente a los 'survivalistas' estadounidenses.
Según el The New Zealand Herald, en 2016, más de 3.500 kilómetros cuadrados de terreno del país han pasado a manos de ciudadanos extranjeros. El gurú de Paypal Peter Thiel incluso ha logrado tramitar la ciudadanía neozelandesa y al instante compró un terreno de 10.930 metros cuadrados.
Ya se vendieron 3.500 km. cuadrados de territorio.
Reid Hoffman explica que Nueva Zelanda se ha convertido en una especie de santo y seña entre los millonarios survivalistas para reconocerse entre ellos.
¿Qué creen estos millonarios que va a pasar exactamente? La respuesta es complicada. Para muchos, el nombramiento de Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos y el Brexit en Reino Unido suponen el inicio de un período de muchos años de inestabilidad, pero no es el único factor.
Peligro, Trump en el gobierno.
Tras este movimiento de survivalismo hay mucha paranoia colectiva, pero también la percepción de que la sociedad está harta de las élites. Los políticos no están solucionando nada y los casos de corrupción se multiplican para escarnio de los más necesitados. La nota de New Yorker pinta un escenario distópico. Temen un punto de inflexión en el que la desigualdad creciente desemboque en una insurrección popular. Y ellos tienen mucho que perder si la gente golpea a sus puertas con antorchas y guadañas.