31 Octubre de 2019 13:17
En una decisión dividida, el Congreso de Estados Unidos aprobó el impeachment (juicio político) a Donald Trump. Los votos a favor fueron 232 mientras que hubo 196 manos levantadas en contra.
"Miedo de la verdad"
Antes de que se efectuara la votación, la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi -miembro del opositor Partido Demócrata- describió el proceso al que se someterá el presidente como "solemne" y "lejano a cualquier tipo de alegría"."No sé por qué los republicanos tienen miedo de la verdad", agregó en referencia al partido oficialista remarcando que los miembros del partido deberían apoyar la idea de que "el pueblo norteamericano pueda escuchar por sí mismo como sucedieron los hechos".
La acusación
El proceso de impeachment fue activado por Pelosi el 24 de septiembre luego de que saliera a la luz una llamada telefónica en la que Trump presiona a su par ucraniano, Volodimir Zelensky, para que investigue a las empresas en ese país de Hunter Biden, hijo del precandidato demócrata Joe Biden, rival político del presidente estadounidense.
Luego de esta revelación, una serie de figuras diplomáticas y dirigentes políticos han ofrecido testimonios que profundizarían la sospecha alrededor de Trump, apuntando a que junto a su abogado Rudolph Guliani habría instrumentado una serie de "diplomacia paralela" para convencer a Ucrania de que genere información para dañar la reputación de Biden.
Por ahora, no se sabe la fecha puntual en la que comenzará el proceso de impeachment cuyos primeros pasos incluirán audiencias en público en las que el primer mandatario ya podrá ejercer el derecho a la defensa.
Pasos a seguir
Luego de esta investigación, a cargo de la Cámara de Representantes (el equivalente a la Cámara de Diputados en la Argentina), y de la aprobación del proceso (paso equivalente a una acusación formal), éste pasa al Senado que es el cuerpo que lleva adelante el juicio bajo la supervisión del presidente de la Suprema Corte. En este punto, un grupo de legisladores toma el rol de fiscalía y los senadores son el jurado, mientras que al presidente se le permite tener abogados defensores.
Para condenar al acusado se necesita el voto de las dos terceras partes de los votos de los senadores. En caso de que el impeachment llegue a buen puerto, el presidente debe ser destituido e inhabilitado para otros cargos públicos.
En la historia norteamericana, sólo dos presidentes han sido sometidos a impeachment: Andrew Johnson (en 1868) y Bill Clinton (en 1998), ambos absueltos. Richard Nixon, mientras tanto, renunció luego de que se aprobara el inicio de su proceso el 8 de agosto de 1974, después de que se destapara el escándalo del Watergate.