Más
Mundo

Escalofriantes detalles de la autopsia a Michael Jackson: pelado, pinchazos y labios tatuados

El cantante tenía pastillas parcialmente disueltas en el estómago y sobrevivía con solo una pequeña ración de comida al día. Su cadera, muslos y hombros estaban cubiertos de marcas de pinchazos.

20 Febrero de 2020 17:34
michael2

El 25 de junio se cumplirán 11 años de la muerte de Michael Jackson. El Rey del pop había accedido a realizar la gira This Is It, una serie de conciertos en el O2 Arena de Londres que empezarían el 13 de julio. Al principio iban a ser 10 shows, pero la cifra escaló a 40 después de que un millón de personas se registrará para comprar entradas en las primeras 24 horas.

Por esa altura, Michael ya lucia totalmente demacrado. Se había vuelto adicto a los analgésicos desde las quemaduras que sufrió en un accidente en 1984 y las acusaciones de abusos sexuales a menores a las que se enfrentó a partir de 1993 y, sobre todo, el segundo juicio sobre este asunto, en 2005 -en el que fue absuelto-, lo hundieron en la adicción y la depresión.

El 25 de junio de 2009, Michael Jackson murió a causa de una intoxicación aguda de propofol y benzodiazepina en su casa en North Carolwood Drive en el barrio de Holmby Hills de Bel-Air, Los Ángeles, California. Conrad Murray se había convertido en el médico privado de Jackson específicamente para la gira, como parte del contrato.

A finales de junio, llevaba seis semanas administrando al cantante dosis de Propofol para ayudarle a dormir. Murray, declaró que había encontrado a Jackson en su habitación, sin respirar y con un pulso apenas detectable, y que las maniobras para reanimarlo fueron en vano. Después de una llamada al 911, fue declarado muerto en el Ronald Reagan UCLA Medical Center.?

Este jueves se dio a conocer detalles del informe de la autopsia que se le realizó a la estrella del pop y que arrojó puntos escalofriantes de su estado físico. De acuerdo a The Sun, el cantante tenía pastillas parcialmente disueltas en el estómago y sobrevivía con solo una pequeña ración de comida al día. Su cadera, muslos y hombros estaban cubiertos de marcas de pinchazos.

Esto se debe a las inyecciones de analgésicos que recibía a diario de Murray, quien fue finalmente declarado culpable de homicidio involuntario por administrar incorrectamente la droga que condujo a la muerte al artista. Además, los labios del “Rey del Pop” habían sido “tatuados de color rosa” mientras que sus cejas eran tatuajes negros, y la parte delantera de su cuero cabelludo también había sido tatuado de negro para combinar con el color oscuro de su cabello.

Sus rodillas tampoco estaban en buen estado: se encontraban magulladas y tenía cortes en su espalda. Su cuerpo también estaba manchado, lo que confirma que sí padecía vitiligo, una enfermedad de pigmentación. Pero lo más inquietante que se descubrió que su cabello era una peluca pegada a su cabeza. Sí, Michael era calvo.

“Era piel y hueso, se le había caído el pelo y no había estado comiendo más que pastillas cuando murió. Las marcas de inyección en todo el cuerpo y la desfiguración causada por años de cirugía plástica demostraron que su declive en sus últimos años”, dijo una fuente a The Sun.

Murray dijo a los investigadores que Jackson tenía un insomnio crónico, era incapaz de dormir y dependía de fuertes drogas para conseguirlo. Aquella noche empezó con 10 miligramos de Valium que tomó a la 1.30 de la madrugada. A pesar de llevar horas bailando, seguía sin dormir. Por eso, optó por darle 25 miligramos de Propofol diluido en lidocaína que terminó matándolo.

El 28 de agosto de 2009, el juez de instrucción del condado de Los Ángeles concluyó que su muerte fue un homicidio. Murray fue condenado por homicidio involuntario en 2011 y cumplió una condena de dos años de prisión.