Una conversación entre Dilma Rousseff y Lula Da Silva, grabada ayer por la Policía Federal brasileña, convierte en certeza la sospecha de que la presidenta lo nombró como ministro de la Presidencia para brindarle fueros y salvarlo de la cárcel.
Dilma nombró a Lula como ministro de la Presidencia, cargo similar al de un Jefe de Gabinete.
Así, en el registro, puede escucharse a Rousseff afirmando que le envía a Lula el documento de su nombramiento para "usarlo en caso de necesidad".
La charla telefónica fue grabada con la autorización del juez Sergio Moro, quien está a cargo de la investigación de la posible participación de Da Silva en el escándalo de corrupción de la petrolera estatal Petrobras.
Con el nombramiento de Lula como integrante del gabinete de Rousseff, la causa ahora deberá pasar al Supremo Tribunal Federal, instancia máxima de la justicia brasileña.
La conversación de la discordia
-Dilma: Hola
-Lula: Hola
-Dilma: Lula, escuchame.
-Lula: Decime, querida.
-Dilma: Estoy mandando a Bessias (subjefe de asuntos jurídicos de la Presidencia) con el papel para que lo tengamos. Usalo sólo en caso de necesidad, que es el acta de asunción, ¿está bien?
-Lula: Está bien, está bien.
-Dilma: Eso, nada más. Esperalo ahí que está yendo.
-Lula: Está bien, estoy acá, me quedo esperándolo.
-Dilma: ¿Está bien?
-Lula: Está bien.
-Dilma: Chau.
-Lula: Chau, querida.