Soportó innumerables intentos de asesinato planificados desde los Estados Unidos, resistió la caída de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y sobrevivió a una gravísima operación intestinal de urgencia hace diez años. Fidel Alejandro Castro Ruz, quien anoche falleció a los 90 años, marcó un antes y un después, no sólo en Cuba, sino en el mundo bipolar del siglo XX.
Fidel nació el 13 de agosto de 1926 en Birán.
Líder de la Revolución que el 1 de enero de 1959 derrocó al dictador Fulgencio Batista, Fidel había recordado en agosto en Cuba Debate cómo comenzó desde pequeño su acercamiento a las ideas revolucionarias que, a partir de sus 33 años, intentó llevar a la práctica junto a su hermano Raúl, Camilo Cienfuegos, Juan Almeida y Ernesto "Che" Guevara.
Castro lideró la Revolución de 1959 contra Batista.
"Nací el 13 de agosto de 1926 en Birán. Se lo conoce con ese nombre aunque nunca haya aparecido en un mapa. Cuando tenía ocho años acompañé a mi padre a las tierras donde se practicaba la agricultura. Él era arrendatario, no como los españoles, que eran dueños de un continente por los derechos concedidos por una Bula Papal".
Revolución Cubana
La primera intentona del Movimiento 26 de julio fue a través del fallido asalto al Cuartel de la Moncada. Luego de 22 meses preso, Castro debió exiliarse en México. Pero las ideas de Karl Marx, Lenin y José Martí pudieron más que el encierro. Por eso, su guerrilla se preparó para, en un nuevo intento, hacer su ingreso triunfal a Santiago de Cuba.
Fidel y el "Che" se conocieron en el exilio.
Desde el balcón del Ayuntamiento, Fidel se erigió como el líder del flamante Gobierno: "Esta vez, por fortuna para Cuba, la Revolución llegará de verdad al poder. No como en el 95 cuando vinieron los americanos; no como en el 33 cuando Batista traicionó; no como en el 44 cuando los ladrones llegaron al poder. Esta vez sí que es la Revolución".
Desde entonces, la Revolución concentró todo su poder casi exclusivamente en una sola persona: el propio Fidel. Primer ministro por 17 años; presidente por 31 años; primer secretario del Partido Comunista por 46 años; y jefe de las Fuerzas Armadas por 51 años. Así, incumplió con el Manifiesto de Sierra Maestra donde prometía "celebrar elecciones para todos los cargos del Estado".
Primer Estado Socialista de América
Como sea, con el liderazgo omnipotente de Fidel, que recién cedió el 24 de febrero de 2008 a su hermano Raúl, Cuba se transformó no sólo en un faro para otros países de la región, como la Venezuela de Hugo Chávez o la Bolivia de Evo Morales, sino también, según la ONU y la Unesco, en una referencia mundial por sus logros en educación y salud.
Fidel, entre Hugo Chávez y Evo Morales.
Sin embargo, el gobierno de Fidel y Raúl fue criticado por sus disidentes en los sus 57 años por la violación sistemática de los Derechos Humanos. Esa es la otra cara de la Revolución Cubana: las Damas de Blanco, que exigen la libertad de presos políticos, los balseros muertos al intentar huir hacia Miami y la crisis diplomática con los Estados Unidos por el caso Elián González.
En paralelo, la caída de la URSS combinada con los más de 50 años del bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos, provocó una crisis terminal al primer Estado socialista de América Latina. Por eso, no sólo debió permitir la reaparición de la propiedad privada sino también el descongelamiento de la relación diplomática con "El Imperio".
Fidel y la Argentina
El líder socialista junto al jefe de la Iglesia Católica.
El 2 de mayo de 1959, Fidel revolucionó Buenos Aires. Allí se entrevistó con el por entonces presidente Arturo Frondizi, participó en el Consejo Económico de los 21, y convocó a toda la región a "crear un mercado único latinoamericano". Castro, obviamente, tenía un sentimiento especial por la Argentina: ese era el país de origen de su mano derecha y aliado más paradigmático, el médico guerrillero "Che" Guevara.
"Y cuando llegue el final del tirano, allí, a tu lado, aguardando la postre batalla, nos tendrás...
El 25 de mayo de 2003, Fidel regresó a la Argentina para la asunción de Néstor Kirchner. "Los soñadores no existen, se los dice un soñador que ha tenido el privilegio de ver realidades que no fue capaz de soñar. He sido afortunado de vivir, a pesar de los cientos de planes por acelerar mi viaje hacia la tumba, obligándome a perder el instinto de preservación", alentó a miles de jóvenes.
"Un mundo mejor es posible, pero cuando se haya alcanzado un mundo mejor, debemos repetir: un mundo mejor es posible
Por su parte, Cristina Kirchner visitó varias veces a Fidel en su residencia en La Habana, la última vez, el 20 de septiembre del año pasado. Ese mismo día, el líder de la Revolución Cubana, confeso ateo, recibió al Papa Francisco, artífice del inicio del desbloqueo aceptado por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Los últimos 90 años
Fidel delegó el poder en 2006 en favor de Raúl.
Fidel fue un producto de las ideas de Marx y Lenin que signaron en parte el "siglo corto" descripto por el historiador socialista británico Eric Hobsbawm en referencia a los 77 años de balas de plomo y tinta entre el inicio de la Gran Guerra de 1914 y la caída de la URSS en 1991.
Los tres líderes tuvieron algo más en común que sus ideales. Sus barbas. De hecho, así lo definió el propio jefe de la Revolución: "Mi barba significa muchas cosas para mi país. Cuando hayamos cumplido nuestra promesa de un buen gobierno, me la afeitaré".