La historia de Ben Ryan comenzó cuando su hija Sol tuvo que ser operada por un coágulo y a los pocos días de haber nacido debieron amputarle una parte de su brazo.
A los 10 días de haber nacido, Sol Ryan fue operada y sufrió la amputación de parte su brazo.
Los médicos le dijeron que no podrían hacer ninguna operación hasta que la nena tuviera un año, pero a su padre eso le pareció mucho tiempo, y en lugar de ponerse a pensar todo lo que la niña no iba a poder hacer, uso su inteligencia para crear un brazo improvisando con las cosas que tenía en su casa.
La beba fue utilizando distintas pruebas en su brazo para asimilar el nuevo prototipo.
Sin tener ningún tipo de conocimiento, primero creó un prototipo con goma espuma, y cuando vio que la beba reaccionaba bien al sistema, creó un nuevo modelo utilizando para ello pequeños trozos de tuberías y accesorios de fontanería. Convencido de que tenía que haber una mejor opción, se puso en comunicación con la universidad galesa de Bangor y pidió ayuda.
Este fue el primer sistema que creo el padre de la nena, Ryan, con las cosas que tenía a su alcance.
Finalmente, con la ayuda del personal universitario, usaron una nueva tecnología para imprimir en tres dimensiones un brazo para Sol. El cambio en la vida de su hija fue tan notable, que Ryan decidió dejar su trabajo y dedicarse a la creación de su propia compañía.
Ryan patentó la prótesis de Sol, quien ahora tiene dos años, y la convirtió en una marca llamada Ambionics, cuyo lema es “mejorando el futuro”.
Ryan se animó a crecar su propia marca, llamada Ambionics.
“El éxito de mi mecanismo DAHB patentado se basa en las prestaciones avanzadas de la impresora Stratasys Connex: la posibilidad de combinar materiales rígidos y blandos en una sola tirada de impresión fue esencial para sacar adelante el diseño”, explica Ryan en su sitio web.
“Básicamente, toda la prótesis se imprime en 3D. La producción y el uso de las unidades es posible gracias a los materiales de impresión 3D similares a la goma y con soporte soluble de Stratasys", afirma.
Así luce Sol en la actualidad con su prototipo.
Ambionics tiene previsto presentar su tecnología en todo el mundo y pronto la empresa lanzará una campaña de financiación colectiva para realizar pruebas y poder solicitar la comercialización en el resto de los países.