por Agustin Gulman
24 Enero de 2019 17:25“Venezuela es el país con mayor recursos de petróleo pesado, casi 40 veces por encima de Arabia Saudita, a sólo tres horas y media del puerto más cercano de Estados Unidos. El resto está a 37 horas”.
El dato, más que enfático, lo aporta el periodista y escritor venezolano Modesto Guerrero, autor de la biografía de Hugo Chávez y un hombre muy cercano al fallecido expresidente de Venezuela, para graficar el interés geopolítico de países de la región, incluido Estados Unidos, en un país mucho más pequeño y con menor cantidad de habitantes, aunque con la ventaja de contar con una fuente importantísima de recursos naturales.
Guerrero no niega la profunda crisis social, económica y política que atraviesa Venezuela con el gobierno de Nicolás Maduro, quien asumió su segundo mandato días atrás y fue desconocido por Estados Unidos, una decena de países de la región y de la Unión Europea. Sin embargo, el periodista y militante chavista que desde hace tiempo vive en Buenos Aires apunta hacia el Norte: “La geopolítica contemporánea no sólo se define con las relaciones entre Estados, sino que se define por los recursos y las ideologías”, dice a BigBang.
Ayer el presidente Nicolás Maduro rechazó el intento de Guaidó de tomar el poder.
A pesar de la crítica situación - pobreza, miseria, falta de trabajo y medicamentos y cerca de un millón de venezolanos que emigraron, muchos de ellos hacia la Argentina -, Venezuela es el principal vendedor de petróleo pesado a Estados Unidos. Un estudio de la universidad de Harvard citado por el politólogo Andrés Malamud muestra que el 40,28 por ciento de las exportaciones fueron a los Estados Unidos, seguidas por el 19,59 % hacia China y el 17,89 a la India.
De todos modos, Malamud cree que China tiene intereses más evidentes sobre Venezuela en el mediano plazo. “A diferencia de Estados Unidos, es extremadamente dependiente de la importación de hidrocarburos”, señaló el politólogo a BigBang.
“Hay tres tipos de intereses nacionales: geopolíticos (seguridad), económicos (recursos y mercados) e ideológicos (para sostener alianzas domésticas e internacionales). Creo que la administración Donald Trump actúa basada en la dimensión ideológica. A los funcionarios geopolíticos (Mathis) y económicos (Tillerson) los echaron”, agrega.
Guaidó, de 35 años, es diputado y presidente de la Asamblea Nacional.
El analista internacional Jorge Castro graficó que Venezuela es el quinto país con mayor cantidad de explotación y exportación petrolera. De todos modos, en diálogo con BigBang aseguró que el crudo que produce es especialmente pesado y que antes de ser vendido debe ser refinado en grandes sistemas que hay en los Estados Unidos. Buena parte del petróleo se refina en la empresa venezolana ubicada en Estados Unidos CITGO: hay quienes afirman que Venezuela necesita mucho más a los Estados Unidos que al revés.
Sin embargo, Guerrero asegura que hay un factor interno que influye: “Desde 1927 Venezuela tuvo una dependencia energética de Estados Unidos, no como Estado, sino por parte de compañías que escribieron las leyes petroleras, la diseñaron como si fuera una colonia. Desde 1999 (cuando asume Hugo Chávez) se modificó la relación. Ese cambio generó una reacción que ya lleva 20 años”.
Pero más allá de factores externos, Castro opina que Venezuela vive “un proceso de descomposición de las estructuras políticas, sociales y económicas”. “Es un Estado fallido, se desintegró, hay ingobernabilidad”, agrega el analista internacional. Guerrero coincide en la grave situación que atraviesa su país: “Si el colapso no fuera político, la economía se podría solucionar”.
Ayer en las calles de Caracas hubo masivas protestas contra el gobierno de Maduro.
Por su parte, Malamud considera que “los países latinoamericanos combinan ideología con geopolítica”, y analiza que “la implosión de Venezuela implica un desborde de refugiados”.
De todos modos, el periodista y biógrafo de Chávez remarca que Venezuela es víctima de un bloqueo: “No han permitido comprar medicamentos, ni 17 mil millones de dólares en alimentos, pero hay gobiernos que tampoco permiten vender a Venezuela; hay un profundo amor por Estados Unidos, donde tienen la convicción de que todo lo que huela a izquierda tiene que ser incinerado”.