17 Abril de 2016 19:02
“Necesito encontrar a mi bebé, lleva cinco horas desaparecido”, gritaba desesperada Vanessa Santos, una madre ecuatoriana que se encontraba en la ciudad de Portoviejo al momento del terremoto que azotó el sábado por la noche a Ecuador. Casi trescientos muertos y un centenar de heridos: la postal que dejó la tragedia.
"Mi familia está enterrada en ese local y mi bebé se soltó. Mis hermanas, mis cuñados y mis sobrinos están todos enterrados
El presidente ecuatoriano, Rafael Corra, confirmó que murieron al menos 233 personas.
Según consignó la BBC, la mujer se encontraba esta madrugada en estado de shock y sorteaba como podía los escombros de la ciudad, ubicada a pocos kilómetros del epicentro del temblor. “Mi familia está enterrada en ese local y mi bebé se soltó. Mis hermanas, mis cuñados y mis sobrinos están todos enterrados. Nadie hace nada”, denunció.
"El tercer piso se nos cayó encima. Está mi familia, mi hermana, mis hijos. Todos adentro, como ocho personas en total
Desde el temblor principal, el país sufrió otros 90 movimientos telúricos.
La desesperación de los sobrevivientes también quedó plasmada en el testimonio de otra mujer quien dialogó con la agencia de noticias Reuters en la puerta de lo que quedaba de su casa. “El tercer piso se nos cayó encima. Está mi familia, mi hermana, mis hijos. Todos adentro, como ocho personas en total”, relató en estado de shock.
"Creo que toda mi familia está muerta. ¡Ay, por Dios! ¡Que venga la ayuda, que venga el rescate! Necesito que vengan a remover los escombros. ¡Mis hijos!
La Ruta del Sol (que recorre casi toda la costa del país) fue una de las más afectadas.
Consultada por el cronista sobre la posibilidad de que sus parientes hayan muerto, la mujer reconoció con pesar: “Creo que todos. ¡Ay, por Dios! ¡Que venga la ayuda, que venga el rescate! Necesito que vengan a remover los escombros. ¡Mis hijos!”.
"Tenemos información de personas atrapadas, heridas entre escombros en diversos cantones (provincias) y estamos realizando las labores de rescate -confirmó el vicepresidente-
Cientos de personas permanecen desaparecidas. Los rescatistas buscan sobrevivientes.
Con el presidente, Rafael Correa, de viaje en Roma, su vice, Jorge Glas, fue quien se dirigió por televisión al país. “Tenemos información de personas atrapadas, heridas entre escombros en diversos cantones (provincias) y estamos realizando las labores de rescate”, aclaró, y sumó: “Oraciones para nuestro pueblo. Nos levantaremos de esta. Son momentos muy difíciles”.
El Gobierno activó una línea de crédito por 600 millones de dólares por los destrozos.
Más de 90 réplicas
El terremoto de 7.8 grados en la escala de Richter tuvo lugar el sábado a las siete de la tarde (nueve de la noche, hora argentina) y dejó un saldo que, hasta ahora, asciende a 233 muertos. Siete horas más tarde, los ecuatorianos sufrieron una réplica del sismo, que alcanzó una magnitud de 6.3 grados.
Temen una nueva réplica de igual magnitud: ya se registraron tres de cinco puntos.
Pasadas las cinco de la mañana de Ecuador, el Servicio Geológico de Estados Unidos registró una segunda réplica sobre la costa, esta vez de 5.6 grados. Una hora más tarde, otra réplica de 5.5 azotó al noroeste de la Bahía de Caraquez. En total, desde el temblor principal, el país sufrió 90 movimientos telúricos.