14 Octubre de 2015 14:35
Que está en México, en una isla privada, en Sinaloa, cerca del pueblo que lo vio nacer y fundar la Alianza de Sangre, más conocido precisamente, como el Cartel de Sinaloa. Que sicarios expertos y fuerzas especiales crearon un círculo de protección, que lo protege el gobierno azteca, que desde su escondite ofreció US$ 100 millones por la cabeza de Donald Trump por insultar a los mexicanos. Tratándose del Chapo Guzmán, todo es posible. Hasta que ahora aparezcan los audio “perdidos” de su fuga.
El más buscado. El más temido.
El Chapo Guzmán, desde su fuga hace unos tres meses de la cárcel, ya está emparentado con la leyenda. De hecho Hollywood prepara un film sobre su vida mientras las autoridades ofrecen 5 millones de dólares por su captura.
Lo cierto es que ahora aparecieron los audios de la espectacular fuga del capo Narco y no deja bien parados a los guardias de la penitenciaría que lo alojaba. Mirá el video.
En el video exclusivo de Televisa, se escucha claramente el martillo neumático en la celda del Chapo, además de los gritos de sus vecinos de celda. Los custodios tardaron 25 minutos para acudir y al arribar se escucha cuando uno de los guardias le avisa a su comandante que en la regadera de la celda hay un hoyo "grande" y que el reo ya no está adentro.
Alejandro Encinas, integrante de la Comisión Bicamaral de Seguridad Nacional del Congreso, declaró hace algunas semanas, que existía un video con audio de la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán y que la propia Secretaría de Gobernación (Segob) lo había confirmado.
Lo que revela el video
"El Chapo" se encuentra recostado en su cama de la celda 20, viendo programas en una televisión portátil, a todo volumen.
Se escuchan martillazos contra el suelo en al menos cuatro ocasiones. A pesar del ruido, en el centro de monitoreo nadie reacciona.
A las 20:50 horas, "el Chapo" se levanta y va directo a la letrina donde se escuchan los golpeteos.
Minutos después, se oye que cae tierra y una voz inaudible dice algo desde el túnel.
Joaquín Guzmán Loera regresa, se sienta en la cama y se cambia los zapatos.
A las 20:52 horas entra al túnel y emprende la fuga. Los investigadores señalan que le tomó 15 minutos recorrer el trayecto de 1.5 kilómetros hasta un inmueble en obra en la colonia Santa Juanita, en Almoloya de Juárez, Estado de México.
El reloj marcó las 21:17 y es en ese momento que dos monitoristas de la PF se reúnen frente a un monitor para ver lo que pasa en la celda del "Chapo". Han pasado 25 minutos desde la fuga.
Un minuto después, personal de custodia del Altiplano llegan a la celda y gritan: "Guzmán". Hacen una revisión por fuera de la celda y se escucha: "Hay un hoyo en la regadera" y confirman que el reo ya no está.
Una vida de película, una fuga de película y muchas explicaciones pendientes por parte de las autoridades mexicanas.
