Kate Perry está decidida a comprar con una mansión. Está en venta y tiene el dinero para hacerlo, pero se encontró con una resistencia impensada; las monjas católicas de Los Ángeles, que no la quieren.
Perry visitó a las monjas para tratar de convencerlas, pero no así vestida.
La cantante pop está interesada en comprar un antiguo convento católico en el vecindario de Los Feliz, cerca del centro de la ciudad. La propiedad, con piscina y una vista panorámica de las montañas San Gabriel, alguna vez fue hogar de las Hermanas del Inmaculado Corazón de María.
La propiedad tiene piscinas, jardines y amplios ambientes.
Pero resulta que se encontró con un par de inconvenientes: hay una disputa entre cinco monjas que reclaman derecho sobre la casa y el arzobispo de Los Ángeles, para decidir si se puede vender y a quien. Los documentos de la corte archivados por la arquidiócesis señalan que las hermanas "no tienen permitido vender la propiedad sin consentimiento previo del arzobispo".
La cantante es una de las mejores pagas. Tendría más de 145 millones de dólares.
Las monjas llegaron a un acuerdo formal el 20 de mayo para vender el convento a la millonaria Dana Hollister por 15.5 millones de dólares para hacer un emprendimiento gastronómico y un hotel. Pero la diócesis no aprobó la acción y parece interesada en venderle la propiedad a Perry por 14.5 millones de dólares.
Mientras tanto, Hollister se mudó al convento, pese a que la corte le ordenó permitir a la arquidiócesis mostrar la propiedad a otros compradores interesados. Perry no fue mencionada en los documentos de la corte, a pesar de que las monjas la identificaron frente a los reporteros como la otra persona interesada. La hermana Catherine Rose Holzman dijo a la estación local de la cadena CBS que Perry desea usar el convento como domicilio.
Las monjas no están muy convencidas de venderle a Perry y están en juicio.
Las monjas se oponen a que Perry adquiera el convento: la “googlearon” y lo que vieron las escandalizó. "Encontré a Katy Perry y sus videos y... si se tiene que decir, no estaba feliz con los resultados", dijo la hermana Rita Callanan a Los Angeles Times.
Sin embargo, Perry visitó a las religiosas, dicen que muy decorosamente ataviada y hasta les cantó temas cristianos. Callanan dijo que la visita de Perry podría ayudar a que algunas monjas la aceptena.