La Corte Suprema de Brasil rechazó el hábeas corpus presentado por Lula da Silva y el ex presidente podría ser detenido, en el marco de la causa judicial que aún no tiene condena firme por lavado de dinero. Deberá cumplir una condena a 12 años y un mes, que podría ser en el Complejo Médico Penal de Pinhais.
Se trata de una cárcel conocida como “el presidio del Lava Jato”: allí, en un pabellón aislado del segundo piso, se alojan los detenidos en el marco de causas por casos vinculados al escándalo de corrupción más grande de Brasil, la Operación Lava Jato. El penal está a 40 minutos del centro de Curitiba y alberga a 697 presos.
La confirmación de la Corte Suprema de Brasil sacudió la arena política en Brasil, cuando faltan seis meses para las elecciones presidenciales del 7 de octubre, donde Lula era el claro favorito. La investigación por la que será detenido aún no pasó por las cuatro instancias que prevé la Justicia de Brasil.
El penal donde podría ser alojado el ex presidente Lula da Silva
De acuerdo a la investigación del juez del Lava Jato, Sergio Moro, la constructora OAS pagó la remodelación de un departamento de lujo para Da Silva, quien nunca declaró la propiedad. Sin embargo, Lula siempre negó de manera tajante haber sido el dueño de ese apartamento de lujo.
De ser alojado en el Complejo Médico Penal de Pinhais, Lula tendrá algunos compañeros de prisión muy conocidos: uno de ellos es el ex presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha. Se trata del legislador que más impulsó el impeachment (juicio político) contra Dilma Rousseff en 2016 y que luego fue detenido acusado por hechos de corrupción. Pero también está João Vaccari Neto, el ex tesorero del Partido de los Trabajadores cuyo líder es Lula.
Las celdas tienen 12 metros cuadrados y son para tres reclusos.
De los 697 detenidos, hay 11 que están vinculados al Lava Jato. Por eso se lo conoce como “el presidio del Lava Jato”. Como ocurre en la Argentina con los penales de Ezeiza y Marcos Paz, también hay un pabellón dedicado puntualmente a detenidos vinculados a hechos de corrupción política.
Para que Lula finalmente sea detenido, lo debe requerir el juez Moro. El ex presidente deberá vestir de manera obligatorio un uniforme que consta de un pantalón azul y una camisa blanca con detalles en azul. Compartirá una celda de 12 metros cuadrados junto a otros dos presos.
El ex presidente podría quedar detenido en los próximos días.
Allí tendrá un televisor de 20 pulgadas y una radio AM/FM. Sin embargo, se trata de los únicos elementos electrónicos que podrán utilizar. De ser detenido allí, el ex presidente tendrá derecho a salir a realizar actividad física al patio del penal entre las 9 y las 11 de la mañana. Luego, a las 11 deberá almorzar. Según la revista Istoé, que investigó la vida en esa cárcel, sólo podrán visitarlo dos parientes por mes y no tiene permitidas las visitas íntimas.