La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, está cada vez más sola. Mientras la Corte Suprema Justicia decide si el ex presidente Lula da Silva puede o no asumir con jefe de Gabinete, el vicepresidente Michel Temer anunció hoy que su Partido del Movimiento Democrático (PMDB) rompió su alianza con el Partido de los Trabajadores (PT).
El senador Romero Juca (micrófono) anuncia la salida del PMDB del cogobierno con el PT.
De esta manera, salvo el propio vicepresidente, los siete ministros pertenecientes al PMDB renunciarían a sus cargos antes del 12 de abril. Luego de doce años de exitosa alianza, que incluyó los dos períodos de Lula da Silva y el primero de Dilma Rousseff, el Congreso Nacional del PMDB votó por "independizarse" del PT.
Su plan de gobierno: el vicepresidente de Brasil, Michel Temer, pretende suceder a Dilma Rousseff.
"¡Brasil presente, Temer presidente!", ovacionaron los congresales del PMDB al vicepresidente Michel Temer. "Nos retiramos de la base de gobierno", anunció el vicepresidente del partido, Romero Juca, también senador nacional. De hecho, Michel Temer ya trabaja en un plan de gobierno en caso de que el juicio político avance contra Dilma Rousseff.
Lula da Silva todavía no pudo asumir; Dilma Rousseff, cada vez más cerca del juicio político.
Recorte de programas sociales, inicio de privatizaciones y mayor apertura comercial son algunas de las medidas en carpeta del vicepresidente de Brasil si finalmente el Congreso destituye a la presidenta. Por eso, era vital el apoyo del PMDB al PT: tiene 69 diputados de un total de 513 lugares y 18 senadores de un total de 81 bancas.
El PMDB tiene al vicepresidente, 7 ministros, los presidentes de Diputados y de Senadores, 69 diputados, 18 senadores, 7 estados y 1.041 intendencias en todo Brasil".
Los presidentes de las cámaras de Diputados (Eduardo Cunha) y Senadores (Renan Calheiros) también son del PMDB. Además, gobierna en 7 de los 27 estados y en 1.041 de los 5.570 municipios de todo el país. La investigación al ex presidente Lula da Silva por su presunta participación en casos de corrupción de contratistas de Petrobras, la crisis económica del actual gobierno de Dilma Rousseff y el alejamiento del PMDB podría terminar con doce años de gobierno del PT.