La hasta ahora senadora nacional Jeanine Áñez, asumió este martes como presidenta provisional de Bolivia, luego del golpe de estado que dejó a Evo Morales fuera del poder. La decisión provocó disturbios en las calles, ya que la dirigente se autoproclamó como nueva jefa de Estado aún ante la falta de quórum en la Asamblea Legislativa.
Áñez tiene 52 años, es madre de dos hijos y se crió en la ciudad de Trinidad, en el departamento de Beni. Además, se recibió de abogada y desde 2010 es senadora, primero por el partido del Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), y después, ya designada vice segunda de la cámara alta, como integrante de Unidad Demócrata (UD).
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La funcionaria opositora llegó a la jefatura gobierno luego de las renuncias forzadas de Morales, del vicepresidente Álvaro García Linera; del titular de Diputados, Víctor Borda y los números uno y dos del Senado, Adriana Salvatierra y Rubén Medicaneli, lo que vació la línea de sucesión prevista por la carta magna, y la dejó a ella en el lugar de asumir hasta el llamado a nuevas elecciones.
De esta manera, se convirtió en la segunda mujer en asumir la jefatura del Estado, luego de que en noviembre de 1979, a los 58 años, la cochabambina Lidia Gueiler asumió el mando por apenas 244 días hasta ser derrocada por el general Luis García Meza.
Lo que generó el descontento es que Áñez asumió a pesar de no haber obtenido quórum para concretar la Asamblea Legislativa para aceptar la renuncia de Morales, y su posterior sucesión. Ante esta situación, la nueva presidenta se refirió al artículo 170 de la Constitución que habla del abandono de las autoridades a su cargo tras un asilo político.
"Todos sabemos que el presidente y el vicepresidente han oficializado su renuncia el pasado 10 de noviembre, misma que debe ser considerada por la Asamblea Legislativa para su admisión o rechazo. Sin embargo, ambos abandonaron el territorio del Estado acogiéndose al asilo político, lo que constituye un abandono material de sus funciones, antes de que la Asamblea Legislativa se pronuncie", explicó, y agregó que para garantizar la estabilidad social, debe aplicarse la sucesión presidencial de inmediato.
"Conforme al texto y sentido de la constitución, asumo de inmediato la presidencia del Estado y me comprometo a asumir todas las medidas necesarias para pacificar el país", afirmó acompañada de una biblia que sostuvo en alto.
Áñez fue muy crítica de la gestión de Morales y mucho más de su intento de lograr un cuarto período de gobierno, avalado por el Tribunal Electoral. Como el pueblo boliviano se encuentra dividido y exaltado, ante su decisión, salieron esta tarde a la calle y comenzaron nuevamente los incidentes y reclamos en La Paza de ciudadanos a favor de Morales.