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Llanto, un chiste de Trump y furia: el desplante secreto de Kate a la Reina por la amante de William

Se conocieron los detalles de cómo se vivió el banquete en honor a Donald Trump.

03 Julio de 2019 12:36
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Pasó un mes desde que Donald Trump fue agasajado por la Reina Elizabeth con un banquete en el Palacio de Buckingham. Fue la primera vez que la excéntrica personalidad del presidente de Estados Unidos se vio eclipsada por la tremenda interna que se desató en la Familia Real inglesa, después de que la prensa se hiciera eco de una infidelidad del príncipe William a su mujer, Kate Middleton. La presencia de la amante del heredero al trono, el desplante a la Reina y el operativo que incomodó a todos los presentes.

Según consignaron los medios ingleses, Kate se enteró días antes del evento de que la sindicada como tercera en discordia en su matrimonio había sido invitada al banquete. Al ver que el nombre de su ex mejor amiga, Rose Hanbury, estaba en el listado, Middleton estalló de furia. Después de todo, una de las condiciones que le había puesto a su marido para que el “incidente no escalara” era que tanto Rose como su marido, David Cholmondeley, no fueran más invitados a los eventos reales.

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“Cuando se enteró, Kate exigió hablar con el principal asistente de la reina y le dijo que quería estar segura de que en el salón la sentaran en el lado opuesto al asiento asignado a Rose. La reina aprobó su petición en el último momento, sabiendo lo catastrófico que resultaría que Kate se retirara de la cena de modo inesperado”, consignó el portal Express.

Eso no fue todo. Según recoge The Sun, Kate también le puso condiciones a su marido: “Le dijo a William que no tenía permitido siquiera hacer contacto visual con Rose. Mucho menos saludarla o entablar conversación con ella”. Y el heredero al trono cumplió: no existió un acercamiento y el príncipe estuvo junto a su mujer durante toda la gala.

Tenés prohibido saludarla o hablarle"

Como si eso no fuera poco, la duquesa le pidió a uno de sus asistentes que estuviera atento a todos los movimientos de la amante de su marido. “Le dijo que tuviera un ojo puesto en Rose todo el tiempo para asegurarse de que nunca se acercaran demasiado”. A parecer, la marquesa estuvo “toda la noche ocupada con otras personalidades invitadas al acto”. ¿El motivo? “Claramente fue para que todos la vieran e interpretaran que no había pasado nada malo”.

Trump se dio cuenta de que algo sucedía. La tensión se sentía en el ambiente y, fiel a su estilo, el presidente estadounidense hizo una broma sobre el tema, algo que incomodó a toda la familia real; de acuerdo a los medios ingleses. De inmediato, Camilla Parker Bowles intercedió e intentó calmar las aguas contando una divertida anécdota con Kate y sus tres hijos, pero todo terminó mal.

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Kate la pasó tan mal que estuvo a punto de irse llorando"

Kate la pasó tan mal que estuvo a punto de irse llorando. No lo hizo para no causar un escándalo”, advierten los medios británicos. En efecto, esa noche asistió toda la Corte inglesa, al tiempo que también fueron invitados importantes diplomáticos de todo el mundo.

¿Por qué Rose fue invitada al banquete en honor a Trump?

En efecto, Rose se convirtió en marquesa de Cholmondeley en 2009 cuando, luego de un breve compromiso, se casó con el aristócrata David Cholmondeley. La ex modelo, que además supo ser una de las mejores amigas de Kate, ingresó así a la Corte inglesa; motivo por el cual recibió su correspondiente invitación para el banquete ofrecido por la Reina. Fue la primera aparición pública desde que estallaron los rumores que aseguraban que William y ella mantuvieron un fogoso affaire mientras Middleton atravesaba su tercer embarazo.

Los accesorios con los que Kate le marcó la cancha a Rose

Pero eso no fue todo. De hecho, fueron los accesorios elegidos por Kate los que llamaron la atención de todos. En principio, lució la tiara preferida de la difunta princesa Diana -fue la que le regalaron en 1981 con motivo de su boda con el príncipe Carlos-. La pieza de joyería, valuada en tres millones de dólares, tiene además un nombre particular: “Nudo de amantes”. En los ocho años que lleva de matrimonio, la duquesa la usó sólo en seis oportunidades.

Los otros dos accesorios reales elegidos por Middleton también tuvieron una fuerte impronta real. En efecto, se trata de condecoraciones otorgadas por la Reina, rara vez utilizadas por la duquesa. El pasado 29 de abril, en coincidencia con el octavo aniversario del matrimonio de los duques de Cambridge, Kate recibió la “Real Orden Victoriana”. Se trata del máximo honor protocolar. Como si la insignia y la tiara no fueran suficientes, Middleton también lució su lazo de la Family Order, otorgado también por la Reina en diciembre de 2017. Sólo la reciben mujeres que hayan realizado “grandes labores” para la monarquía.

Kate, William y la cronología de los cuernos reales que hicieron tambalear a la Corona

Diciembre de 2017: William le habría sido infiel a Kate, mientras ella estaba embarazada. La pareja esperaba a su tercer hijo, el príncipe Louis. Marzo de 2018: Kate se enteró del affaire y le ordenó a su marido que expulsara a Rose y a su marido de la Corte. Abril de 2019: los rumores se hicieron públicos cuando los medios ingleses dieron cuenta de la aventura. 

“Si no querés que termine como tu mamá”: la presión de la Reina y el pacto de William antes de la boda con Kate

Corrían los primeros días de abril de 2007. Kate Middleton y el príncipe William llevaban cuatro años de noviazgo. Se habían conocido en el 2002, cuando coincidieron en la Universidad de Saint Andrews y tardaron un año en formalizar su relación, puertas adentro. Las primeras fotos jde la pareja llegaron recién en 2004. Todo cambió un año después, cuando ambos se recibieron y no pudieron disfrutar de la intimidad que les ofrecía la Universidad.

Mientras los medios de Inglaterra esperaban con ansias el anuncio del compromiso real, el príncipe William tomó una decisión que desconcertó incluso a la Reina: tras recibir su diploma, se sumó en octubre de 2005 a las filas del ejército británico en Westbury. El entrenamiento era de sólo seis meses, por lo que la prensa seguía especulando con la inminente boda real.

Con William en el ejército, Kate se instaló en Londres. Se veían los fines de semana y la relación comenzó a enfriarse. “Con el tiempo, él dejó de verla. Le decía que no podía salir por su entrenamiento, pero a Kate le llegaban fotos de William de fiesta en boliches”, confiaron amigos de la pareja.

Mientras tanto, los medios comenzaron a asediar a Kate, que se había instalado en un lujoso departamento londinense que le regalaron sus padres. Con 24 años, se convirtió en una de las mujeres más fotografiadas del mundo y el acoso de los medios preocupaba a la Familia Real. “Como no era un miembro oficial, no podían hacer nada: ni siquiera ponerle protección”.

Los medios la criticaban por no tener un trabajo. La apodaron “Waity Katie” -Katie, la que espera-. “Ella odiaba ese apodo. Los medios planteaban que lo único que hacía con su vida era esperar el compromiso con William, pero no tenían en cuenta que como 'novia real' tenía muchas limitaciones. Estaba en el límite: no era miembro de la Familia Real, pero tampoco podía hacer lo que quisiera”.

El frío llamado telefónico con el que William dejó a Kate: "Esto no va a funcionar"

Mientras que la relación con William se enfriaba, Kate decidió tomar el toro por las astas y aceptó un trabajo como compradora de accesorios para el minorista británico Jigsaw. “La relación venía de mal en peor. De hecho, William la dejó por teléfono y ella estaba trabajando cuando recibió esa llamada. Nadie lo veía venir, menos ella”.

No puedo seguir adelante con esto, sencillamente no va a funcionar. No es justo para vos"

Según Kati Nicholl, autora de la biografía Kate, la futura reina, William no estaba seguro de querer seguir con el noviazgo y se sentía presionado tanto por la prensa, como por su propia familia. “El mundo entero esperaba que se casaran, pero él no estaba tan seguro de querer hacerlo. Le gustaban otras chicas, quería divertirse”.

Fue entonces cuando, agobiado por la presión, el hijo de Lady Di levantó el teléfono y dio por terminada la relación. “No puedo seguir adelante con esto, sencillamente no va a funcionar. No es justo para vos”, fueron las palabras con las de WilliamKate, del otro lado del teléfono, no podía entender lo que acababa de escuchar. Después de todo, llevaba meses preparando su casamiento.

William se sentía sofocado por la relación. Era joven, tenía ganas de experimentar otras cosas"

“William se sentía sofocado por la relación. Era joven, tenía ganas de experimentar otras cosas. Todo el mundo esperaba que se casara y sentara cabeza, pero él tenía otras intenciones”, advirtieron amigos de la pareja. “Kate, por su parte, estaba preparando el casamiento. Para ella la separación fue durísima”.

El incómodo momento en el que le preguntaron a Kate por la separación con William: "En ese momento no fue algo que me hiciera feliz"

En efecto, la actual duquesa confesó el malestar que sintió tras la ruptura durante la primera entrevista que dieron como pareja el día que anunciaron su compromiso oficial. Fue en noviembre de 2010. “En ese momento no fue algo que me hiciera feliz, pero creo que con el tiempo me hizo una persona más fuerte. Me permitió conocer cosas mías que no veía. Cuando sos chico, una relación puede consumirte mucho. Así que creo que me hizo bien, aunque en ese momento no lo veía de esta manera”.

En ese momento no fue algo que me hiciera feliz, pero creo que con el tiempo me hizo una persona más fuerte"

William también habló al respecto. “Éramos chicos, acabábamos de salir de la universidad y estábamos encontrándonos como personas. Estábamos creciendo, necesitábamos un poco de tiempo y creo que en retrospectiva nos hizo muy bien”.

La separación fue un golpe duro para Kate. “Estuvo muy mal, pero por el otro lado entendió un poco el juego de William. Empezó a mostrarse en todos lados, salía todas las noches con amigos. Le mandaba un mensaje claro: 'Mirá lo que te estás perdiendo'”, señalan amigos de la pareja. Y, en efecto, William seguía atento todos los movimientos de su ex.

Kate fue una estratega y la clave principal de su reconciliación con William tuvo mucho que ver con el hecho de que jamás habló con los medios. Tampoco le permitió a su entorno que revelaran detalles de su relación con William. Sabía que si comenzaban a filtrarse intimidades sería imposible la reconciliación”.

Por ese entonces, William y Harry organizaban un concierto en homenaje a su madre. Se cumplían diez años de la muerte de la princesa Diana y los príncipes organizaron un show a beneficio en el estadio de Wembley. Ese primero de julio de 2007, la imagen de Kate junto a su hermano y amigos no pasó inadvertida. Si bien no compartió el palco con su ex novio, la prensa coincidió en que su presencia era una confirmación del acercamiento de la pareja.

La advertencia de la Reina y el príncipe Philip a William: "No juegues con Kate si no pensás casarte con ella"

¿Cuánto tuvo que ver la Reina y el príncipe Philip en la reconciliación? Mucho. “CuandoWilliam y Kate empezaron a verse de nuevo, la Reina lo sentó y le habló con claridad. 'Si no querés que termine como tu mamá, vas a tener que casarte y comprometerte con la relación. Si no querés hacerlo, no vuelvas con ella. La vas a lastimar'”.

Si no querés que termine como tu mamá, vas a tener que casarte"

“Después de la muerte de Diana, la Reina le dejó en claro a la familia real que quería que sus nietos se casaran por amor. Había aprendido de la experiencia con Carlos y no quería que ellos también se vieran atrapados en un matrimonio que los hiciera infelices. Por eso, cuando William se reconcilió con Kate, ella fue muy clara”. Lo mismo hizo su marido, el príncipe Philip. “No juegues con ella si no pensás en casarte”.

La reconciliación llegó justo antes de que Kate participara en una carrera de remo por el río Támesis. Era para caridad y los medios no paraban de sacarle fotos durante los entrenamientos. Emma Sayle, una de las mejores amigas de Kate y la madrina del príncipe George, confirmó en una entrevista a Vanity Fair que ese fue el momento en el que decidieron volver a darle una oportunidad a su relación.

Durante la separación, Kate estuvo en contacto todo el tiempo con William"

“Durante la separación, Kate estuvo en contacto todo el tiempo con William. Él estaba muy orgulloso de que ella participara de la carrera y planeaban encontrarse en la línea de llegada, pero no querían que la prensa los vieron. Así que, por cuestiones de seguridad, Kate se retiró de la carrera y se encontraron en secreto. En ese momento decidieron que era una tontería estar separados porque se amaban”.

El pacto secreto de William y Kate antes de casarse

En agosto del 2007, la reconciliación era un hecho. William y Kate hicieron un viaje secreto a las islas Seychelles y fue en ese momento en el que hicieron un pacto: se iban a casar, pero todavía no pondrían fecha. “Era importante para Kate saber que el compromiso era real. Para William era sacarse un peso de encima, no querían que los medios los siguieran presionando con el tema”.

De a poco, la pareja volvió a mostrarse en público. Kate volvió a participar de eventos oficiales, fue recibida por la reina y recibió una custodia adicional que fue costeada por el príncipe Carlos. Finalmente, el 16 de noviembre de 2010 la pareja anunció su compromiso en el palacio de Buckingham.