El ex presidente de Brasil Luiz Inácio “Lula” da Silva fue procesado este viernes por “obstrucción a la justicia” por un tribunal de Brasilia en el marco de una denuncia en la que se lo acusa al ex mandatario de haber “comprado” el silencio del ex director de Petrobras, Nestor Cerveró, en uno de los mayores escándalos de corrupción del país vecino: el caso del Petrolão.
El ex presidente de Brasil se convirtió en imputado y aún tiene varias otras causas abiertas.
Esta es la primera vez que el ex mandatario y líder del Partido de los Trabajadores es imputado. A su vez, también recibieron el mismo proceso judicial el senador oficialista Delcidio Amaral, y su asesor Diogo Ferreira; el banquero André Esteves; el empresario José Carlos Bumlai y su hijo Mauricio; y el abogado Edson Ribeiro.
Delcídio Amaral, ex jefe del bloque del PT en el Senado.
En la denuncia, tanto a Lula como al resto de los procesados, se los acusa de tres crímenes diferentes. El primero y principal, de obstruir la investigación de una organización criminal, cuya pena podría ir de los tres a los ocho años.
El segundo es por el patrocinio infiel. Esto sucede cuando un abogado no defiende correctamente los intereses de su cliente, por lo que podría caberle una pena entre seis meses y tres años. Y por último, por abuso de poder con una pena de entre uno y cinco años.
Por primera vez, Lula fue procesado por la justicia de Brasil.
La acusación, que por primera vez convierte a Lula en reo de la Justicia, fue aceptada un día después de que el ex presidente acudiera, a través de sus abogados, al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, para denunciar que es víctima de una "persecución política y judicial" en Brasil.
Además, el procesamiento a Lula también llega tras el acuerdo judicial que Delcídio Amaral hizo tras ser detenido por su implicación en la red de corrupción que operó en Petrobras. Por medio del cual denunció que Lula le encargó pagar 250.000 reales (unos 77.000 dólares) para "comprar el silencio" de Nestor Cerveró, arrestado por las corruptelas en la petrolera.
Nestor Cerveró, ex director de Petrobras.
La Operación Lava Jato o mejor conocida en el país vecino como “Petrolão”, la investigación llevada a cabo por la Policía Federal de Brasil y que se hizo pública en 2014, intenta sacar a la luz el esquema de lavado de dinero de unos 10.000 millones de reales brasileños. Y considerado por la Policía Federal, como la mayor investigación de corrupción de la historia del país.