"Un diálogo constructivo que permita aliviar el sufrimiento de la gente", fue el pedido que le hizo el Papa Francisco al presidente venezolano Nicolás Maduro, quien le realizó una visita sorpresa en el Vaticano.
Nicolás Maduro llegó hoy de sorpresa al Vaticano.
Venezuela enfrenta una dura crisis social, económica y política que preocupa no sólo a esa Nación sino a toda la región. El Vaticano indicó tras la reunión privada que mantuvieron ambos líderes que, el Pontífice invitó al mandatario a "emprender con coraje el camino del diálogo sincero y constructivo, para aliviar el sufrimiento de la gente, de los pobres en primer lugar, y promover un clima de renovada cohesión social que permita mirar con esperanza al futuro de la Nación".
De esta manera, abrió el camino para un diálogo entre la oposición y el oficialismo venezolano. "El Papa, que tiene en el corazón el bien de todos los venezolanos, deseó continuar ofreciendo su contribución a favor de la institucionalidad del país y de cada paso que contribuya a resolver las cuestiones abiertas y crear mayor confianza entre las partes",indicaron desde la Santa Sede.
Luego de confirmar que la oposición había manifestado por escrito su voluntad de una mediación vaticana que favorezca el diálogo, hasta hoy no había habido un acercamiento formal de parte del oficialismo.
La audiencia tuvo lugar un día después de que la Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, aprobara un acuerdo para restablecer el orden constitucional, tras la suspensión del Gobierno de realizar un referendo revocatorio contra Maduro.
En 2015 Maduro canceló una cita con el Papa a pocas hora de tener lugar el encuentro, así como a comienzos de este año el mandatario tampoco respondió una carta del Pontífice.