En el barrio de Realengo, en el oeste de Río de Janeiro, todos los días se congregan decenas de mujeres para que Erika Romero las reciba en su amplia terraza. Allí se desnudan, se acomodan en reposeras y se quedan inmóviles bajo el impiadoso sol carioca.
Cuál es el objetivo: conseguir una sexy "marquinha" en sus cuerpos. Y cuanto más pequeña, mejor. Ellas toman el sol durante tres horas al día en la terraza de Romero, casi sin protección para la piel y sin vestir nada más que cinta adhesiva en sus partes íntimas. El objetivo de estas sesiones es conseguir la máxima demarcación posible de las líneas de bronceado.
Erika es la impulsora de esta moda que se está propagando las mujeres brasileñas y aparece ya incipientemente en otros países latinos. En una entrevista con la agencia EFE, Romero dice que la ansiada 'marquinha' con cinta adhesiva simula a la perfección el bikini más diminuto y que eso " les encanta a los hombres".
Marquinha perfeita produto @ErikaBronze vem verão ?????? pic.twitter.com/ZnQ8vKhd7v
- Erika Bronze (@ErikaBronze)
Sensual, pero peligrosa
El presidente del XXI Congreso Ibero-latinoamericano de Dermatología y médico dermatólogo Fernando Gatti afirma que el carcinoma, que es el cáncer de piel más frecuente, es "sol-dependiente". Gatti recomienda usar un protector a partir de 30 FPS y no exponer deliberadamente la piel a quemaduras, especialmente a mitad del día. Esto es harto sabido.
Sin embargo, Romero asegura que la prolongada exposición de sus clientas a los rayos ultravioleta no representa ningún riesgo porque "siempre usan protección solar", nivel 15 FPS y que se aplican solo una vez bajo el sol "más fuerte de todo Río de Janeiro".
@sbtrio aqui no espaço @ErikaBronze #vem #verao (21)3287-9912 ou (21)995468387 pic.twitter.com/3s3KdV6Qux
- Erika Bronze (@ErikaBronze)
La polémica Erika cobra alrededor de 20 dólares por cada una de estas sesiones, gracias a las cuales el verano pasado logró facturar 24.000 dólares y prevé 30.000 dólares para esta temporada.
Este preocupante aumento en la demanda del 'servicio' se ve reflejado en su página de Facebook, cuyo número de seguidores se ha duplicado en menos de dos meses, contando ya con casi 60.000 'me gusta'.
Bronceada hasta la muerte
Si esta tendencia logra expandirse por el resto de Latinoamérica, los problemas dermatológicos se multiplicarían en una región donde la mortalidad debida al cáncer de piel ha crecido en más de 68 por ciento durante las últimas dos décadas y media.
El cáncer de piel es el tipo de cáncer más común en Brasil, comprendiendo el 30 por ciento de todos los tumores malignos registrados en ese país. El Instituto Nacional del Cáncer brasileño estimó que entre el 2016 y el 2017 alrededor de 98.000 mujeres lo contraerán, de las cuales 3.000 sufrirán de melanoma maligno, que es el cáncer de piel más mortal.