14 Marzo de 2018 07:00
Conmoción en el mundo de la ciencia. El hallazgo de una momia de tres dedos en las Líneas de Nazca de Perú revolucionó a los especialistas. Konstantin Korotkov, de la Universidad Nacional de Investigación de Rusia, confirmó que los restos no son de un “homo sapiens” y que datan de hasta 6.500 años de antigüedad.
Fue encontrada cerca de las Líneas de Nazca en Perú.
La momia, a la que le atribuyeron el nombre de María, fue encontrada en una tumba en las Líneas de Nazca, un grupo de geoglifos precolombinos que abarcan casi mil kilómetros cuadrados del desierto peruano.
“Es un ser humanoide, lo que significa que también tiene 23 cromosomas como nosotros”, advirtió el especialista. Sin embargo, su estructura ósea llama la atención: sus costillas tienen forma de quilla en la parte superior de la caja torácica, que consiste en un puñado de huesos semicirculares.
Sus restos datan de hace más de 6.500 años.
Al momento, los especialistas estudian los órganos internos de la momia, que fue enterrada cubierta por un polvo blanco (identificado como cloruro de cadmio) que permitió la preservación de los restos por su efecto antibacteriano.
Además de María fueron encontradas otras cuatro momias macho en la zona, una de las cuales tenía nueve meses al momento de morir y fue nombrada “Vavita”. El equipo que trabaja en el análisis de los restos considera que podrían ser madre e hijo.
“Cada una de las pequeñas momias tiene dos brazos, dos piernas, una cabeza, un par de ojos y una boca. Las exploraciones tomográficas revelan sus esqueletos. El tejido tiene una naturaleza biológica. Parecen humanos, pero no lo son: su estructura anatómica es diferente”, explicaron.
“María y Vavita podrían haber sido representantes de una raza determinada que posiblemente haya alcanzado una etapa de avance mucho antes que nosotros, tal vez miles de años antes”, remató Korotkov.