12 Mayo de 2016 06:27
Dicen que para el amor no hay edades y Marcela Tedeschi Araújo Temer, más conocida como Marcela Temer, parece una militante radicalizada de esta consigna: tiene 33 años, 43 menos que su esposo, y ahora flamante presidente de Brasil.
Se conocieron en una convención del PMDB, el partido de Temer, cuando ella tenía 19 años y él 62. Ambos dijeron que hubo flechazo. El nuevo presidente viene de dos matrimonios anteriores y tiene cuatro hijos anteriores, dos de ellos mayores que Marcela.
Marcela Temer: Primera Dama, a puro animal print.
Temer y Marcela tuvieron un hijo, Michelzinho, que ya tiene siete años. "En nuestro caso no hay edad, es como si mi marido tuviera 30 años, él tiene su pasado y la llegada de nuestro hijo nos unió mucho más", contó ella al diario O Estado de Sao Paulo.
Marcela, luciendo su brassier de encaje.
La publicación reciente en la revista Veja de una entrevista a Marcela con el título "Bella, recatada y del hogar" irritó al progresismo y al feminismo de su país.
La actual Primera Dama, en la época en que aspiraba a ser reina de belleza.
Las usuarias poblaron las redes con fotos donde se burlaban de la consigna y aparecían alzando el dedo en el tradicional gesto de Fuck You, o sosteniendo tampones o papel higiénico, o tomando cerveza. El título llegó a ser un burlón Trending Topic en Brasil
Una burla al título sobre Marcela Temer: Bella, recatada y del hogar.
Rastreando archivos pueden encontrarse abundantes declaraciones de Marcela a favor de Dilma, a quien calificó, entre otras cosas, como "elegante e inteligente". Sin embargo, no sería justo caerle encima por ello: en ese momento, las relaciones políticas entre su marido y Rousseff marchaban viento en popa.
Marcela, contenta mientras Dilma se va.
Apenas terminó la secundaria, Marcela se convirtió en modelo y participó de diferentes concursos de belleza. También estudio Derecho: se convirtió en abogada, pero jamás ejerció. Su trabajo al lado de Temer es clave: ella se encarga de posicionarlo en las redes sociales.
En el año 2013, al hombre que acaba de convertirse en presidente se le dio por la poesía y publicó un libro, abundante en poemas eróticos. Lo tituló Anónima intimidad y seguramente aumentará sus ventas en los próximos días. La sombra ardiente de Marcela aparece en ellos. Veamos.
Le maneja las redes sociales y le da letra para sus poemas eróticos.
Fuego
Llamaradas de fuego
Ojos brillantes
Que sonríen
Con labios apasionados
Incendios
Que se apoderan de mí
Mi mente
Mi alma.
Todo mío
En brasas.
Mi cuerpo
Incendiado.
Consumido
Disuelto
Finalmente
Quedan cenizas
que esparzo en mi cama
Para dormir.