A la alemana Martina Big le aburrió su estirpe alemana, y un día decidió que quería convertirse en una pulposa mujer negra. Para ello invirtió unos US$ 65.000 y no sólo cambió su color sino que se implantó tantas siliconas, que hoy es la mujer con los pechos más grandes de Europa.
Martina comenzó su transformación en 2013.
Esta ex azafata optó primero por cambiar su busto, y se puso 20 kilos de prótesis. Su primer objetivo era parecerse a Pamela Anderson, pero luego desistió. Luego quiso ser una especia de Barbie exótica, buscando "teñir" su piel de negro.
Una publicación compartida de Martina Big (@martinabigofficial) el 11 de Jul de 2017 a la(s) 10:38 PDT
Largas sesiones de cama solar, inyecciones de bronceado y una fuerte exposición al sol fueron convirtiendo su piel germana en color ébano. Para completar su look cuasi africano, vistió de rulos su pelo lacio.
Una publicación compartida de Martina Big (@martinabigofficial) el 3 de Jul de 2017 a la(s) 10:16 PDT
"Mi sueño es volverme más y más oscura, y ver cuáles son los límites", decía al comienzo de la transformación, cuando tenía 23 años. Hoy cinco años después su novio Michael recorre el mismo camino, ya que también comenzó a broncear su piel con inyecciones, mientras Martina va por más: "Ahora necesito que mi trasero acompañe".