Nació el bebé de Meghan y Harry: las diferencias "protocolares" que dividen a los nietos de Lady Di

Luego del nacimiento del hijo varón de Meghan Markle y el príncipe Harry, ahora resta saber cuál será el nombre que los flamantes padres elegirán para el niño. 

Usualmente, la familia real inglesa elige nombres convencionales y sobrios, por lo cual muchos piensan que el bebé podría ser bautizado como Charles en honor de su abuelo paterno, con el que la duquesa de Sussex -según dicen- tiene una excelente relación. 

Mientras tanto, varios notaron que en su antiguo blog The Tig, Markle supo relatar que uno de sus nombres favoritos era Grey. Y en las casas de apuestas de Inglaterra iban picando en punta "Arthur" y "James" como posibles opciones. 

El bebé estará apenas por debajo de su padre en la línea de sucesión de la corona británica, es decir, en el séptimo lugar. Al ocupar un lugar tan lejano, no llevará el título de príncipe ni el apelativo de alteza real. 

Se estipula que para instancias administrativas -como su registro en un colegio, por ejemplo- el niño llevará el apellido Sussex replicando el ducado de sus padres, así como sus primos llevan el de Cambridge.

De acuerdo a las reglas establecidas por el rey George V, el hijo mayor y heredero de un duque puede utilizar alguno de los títulos de menor grado de su padre. Así, se espera que el hijo de Harry se convierta en conde de Dumbarton, título subsidiario que el príncipe recibió de la reina Elizabeth II el día de su boda. 

Sin embargo, todo podría cambiar si la soberana inglesa decide cambiar las reglas para brindarle a los hijos de Harry y Meghan los títulos de príncipes y altezas reales. 

Una vida más libre

Más allá de eso, el hijo de Harry y Meghan tendrá menos obligaciones que sus primos George, Charlotte y Louis, hijos del príncipe William, heredero al trono. 

George, en especial, es tercero en la línea de sucesión y se espera que algún día sea rey después de su padre, mientras que sus hermanos deberán ser realeza "full time" cuando crezcan y no podrán dedicarse a ninguna tarea laboral. 

El hijo de los duques de Sussex, sin embargo, tendrá libertad para seguir su vocación, y podrá estudiar y trabajar de lo que desee. Algo que -por ejemplo- hace Eugenie, prima de WIlliam y Harry, quien dirige una galería de arte.